Mientras estudiaban se les cayó el cielo raso en Aranzazu

LA PATRIA | ARANZAZU

El jueves pasado será un día que no olvidarán 10 niños de la escuela Eladia Mejía, en la vereda La Plata, de Aranzazu, porque un ruido sobre sus cabezas los alertó del desplome del cielo raso del salón de clases. 
Gritos se escucharon por todos lados, mientras la profesora María Lucía Giraldo, quien había salido, intentaba abrir la puerta. Fueron momentos de angustia y pánico para todos: "La puerta no se abría y con una guadua que tenía a la mano hice palanca y pude entrar. Los niños estaban muy asustados y llorando agachados debajo de los pupitres".
Al parecer, el techa cayó debido al mal estado, y gracias a un estante de libros y la mesa de la profesora se formó un triángulo de vida que protegió a los niños de un siniestro.
La maestra logró sacar a todos los niños, quienes no presentaban heridas, solo quedó un llanto desconsolado por el hecho y la escuela destruida. Según la docente, las autoridades municipales ya conocían el deterioro estructural del plantel.
El alcalde de Aranzazu, Gabriel Zuluaga, expresó que se atendió la emergencia y se instalará un cielo raso nuevo. Asegura que la situación de las escuelas rurales no es la mejor, pero con el vendaval del pasado jueves algunas estructuras empeoraron. "La Defensa Civil tumbará lo que queda del cielo raso y la próxima semana lo reemplazaremos", concluyó.