DIEGO FERNANDO HIDALGO

LA PATRIA | IRRA-NEIRA

“Es mejor el riesgo que el hambre, esa es la frase de combate de los mineros en Irra (Risaralda)”, le dijo ayer a LA PATRIA Olga Lucía Moreno, Ella estaba en las afueras de la Aldea-El Bosque, en zona rural de Neira, esperando noticias de su esposo, Luis Esteban Londoño, de 31 años, uno de los 11 mineros atrapados desde las 4:00 de la tarde del viernes en esa explotación, a orillas del río Cauca.

No pudo contener el llanto al contar que su pareja empezó a trabajar apenas desde el miércoles, cuando se vino de otra mina en el sector El Bohío, del mismo municipio. “Es que en Irra se vive del diario”, repitió un hombre que la acompañaba.

Lo que hoy es una tragedia para este gremio comenzó por unas fuertes lluvias en el sector. con tormenta eléctrica. Al parecer, la mina se llenó de agua del Cauca y se inundó. Olga Lucía contó que la necesidad lleva a los mineros a meterse a las explotaciones, así el río esté crecido.

“Unos contaron que se oía cuando el afluente arrastraba las piedras. Sabíamos que estaba grande, pero toca arriesgarse, no hay de más. Mi esposo me dijo que estuviera tranquila. Dicen que él fue quien rompió el río, pues iba picando para el lado del Cauca”, anotó.

Olga Lucía se alejó unos metros y abrazó a Heidy, quien aguardaba por la suerte de su hermano, Samuel. Ella prefirió llevar su dolor en silencio, en compañía de otras familias.

Mientras tanto, 5 metros abajo, a orillas del Cauca, bomberos, mineros, policías y defensa civil adelantaban ayer labores de bombeo para empezar con el rescate. Eran las 8:20 de la mañana. A la par, en los diálogos, otras personas recordaban que esta tragedia era similar a otra ocurrida el 13 de mayo del 2015, cuando perecieron 15 mineros en el sector El Playón, de Riosucio, 100 metros adelante del Túnel de Irra, en la vía a La Felisa. Ahí murieron, al menos, 5 personas de Irra.

Arribo

Para llegar a la zona se debe llegar hasta el sector de Cuba, antes del peaje de Irra (sentido Manizales-Medellín), desviarse por una carretera destapada y transitar durante unos 20 minutos por una vía lisa. Luego tomar el llevo o marranita (transporte sobre rieles), durante unos 7 minutos. A un costado del tramo está el ingreso a la mina, en un predio lleno de maleza y pantano.

La situación trae al escenario el debate sobre este tipo de minería. Benjamín Elías Tabarquino, vocero de AsomIrra, expresó que los trabajadores ancestrales y artesanales han tenido mesas de diálogo con el Gobierno y los gobernadores, donde piden que los formalicen, pero que en dos años que llevan con esa lucha no se han dado propuestas de allá para acá.

Mientras tanto, a los alrededores de la mina seguía arribando más gente, a la espera de saber de los suyos, escuchar a las autoridades con posibles soluciones de formalización o saber cómo podían ayudar. Ahí seguía Olga Lucía. “Sabemos que no están vivos, pero que al menos nos entreguen sus cuerpos”, sentenció.

Ubicación

Algunos desaparecidos

Vecinos del sector y mineros entregaron nombres de algunos desaparecidos, pues las autoridades no lo hicieron hasta el cierre de esta edición. De algunos solo sabían los apodos.

Henry Jiménez.

Samuel Tapasco.

Juan Bautista Bañol.

Sandro Escarpeta.

Joel Briceño, de Venezuela.

Luis Esteban Londoño

Morocho.

Alexis, apodado Bolas, dueño de la mina según la comunidad.

*Nota: se habla de 11 basados en el reporte del personal que entró a la mina a laborar. Hasta el cierre de esta edición no habían recuperado ningún cuerpo.

En el 2020 fallecieron 4 mineros en Riosucio y 2 en Marmato.

La frase

“Antes, en estas minas, había de 60 a 70 trabajadores”, minero.