Encontraron los cilindros y se toparon con un campamento en Riosucio

LA PATRIA| MANIZALES

El recorrido fue de una hora en carro y seis a pie. Acamparon, participaron en un ritual indígena de saneamiento pidiendo "permiso" a la naturaleza y los espíritus de la montaña para ascender hasta 2.970 metros sobre el nivel del mar y luego internarse en la selva, donde los guerrilleros del frente Aurelio Rodríguez de la Farc se escondían en las épocas de la guerra.

Hasta esta zona rural del resguardo San Lorenzo llegaron el personero de Riosucio, Mateo Díaz, hombres del grupo de explosivos del CTI Caldas y del Ejército. Hallaron cinco cilindros explosivos enterrados y abandonados por ese grupo ilegal. Los destruyeron en presencia de la guardia indígena y trajeron un poco de tranquilidad a esa zona. También ubicaron un antiguo campamento para unas 200 personas.

"Nos demoramos dos días. Era un terreno muy difícil. Se llegó por información de la comunidad. Lo que se hizo fue el operativo para la destrucción, con todas las precauciones del caso", contó Díaz.