LA PATRIA | MANIZALES
En la sala de espera del aeropuerto La Nubia velones y cartulinas enroscadas eran el alivio para unas 50 personas, entre familiares y amigos que esperaban ayer a Andrés Felipe Calle. Por fin, después de 58 días, podían sentirlo vivo, sin heridas y a salvo.
Luego los brazos extendidos de Andrés Felipe se asomaron entre los pasajeros del vuelo de Avianca, sus padres y su hermana lo abrazaban y los saludos de bienvenida llenaban el espacio.
"Gracias a mis padres que han estado dando esta batalla y un saludo a los secuestrados. Ustedes no saben el ánimo y la energía que es escuchar en la noche que hablan de algún secuestrado", expresó Andrés Felipe al primer contacto.
Después de pasar por 11 lugares diferentes, con una cadena atada a un pie y con hasta 18 guerrilleros custodiándolo, su sensación de libertad es lo más importante ahora.
Comentó que el primer día lo pasó en un cambuche cerca de una quebrada: "Dormimos en el piso con una lona y cama de hojas". Durante su cautiverio, poco se habló con los insurgentes, que se identificaron del Eln. "Pero cuando me dijeron que me iban a liberar, algunos empezaron a preguntarme qué hacía y por qué estaba retenido".
En las manos de Dios
Su familia lo esperó en la sede del Comité de la Cruz Roja Internacional en Bucaramanga, el pasado martes en la tarde. "Lo primero que me dijo fue feliz cumpleaños papá, porque fue el lunes pasado y él tenía muy presente la fecha", comentó con voz quebrada Carlos Arturo Calle.
Andrés Felipe dijo que no le dieron información sobre la familia y que además, no supo cómo les había ido a sus acompañantes. "No tenía idea de noticias, porque cuando había una radio no había señal o no habían pilas", manifestó.
Y que en las noches rezaba, porque quizás no había rezado tanto como en su secuestro.
Durante los abrazos y lágrimas de sus familiares, Luis Orlando Giraldo aprovechó y delante de todos le preguntó por su cuñado desaparecido hace cinco años. Le dijo que si durante su cautiverio estuvo acompañado, que si en alguna celda había visto a Francisco Javier Giraldo, de 42 años, que desapareció cuando fue a trabajar a la empresa Mabe, de Manizales en el 2009. A lo que Andrés Felipe respondió que no, y el hombre agradeció el gesto.
En el reencuentro respondió inquietudes de los medios de comunicación.
De cerca
¿Por qué lo secuestraron?
Por ser geólogo estaban investigando si yo hacía un tipo de exploración minera o con el campo energético. El Eln no me llevó para que trabajara con ellos, ni a que hiciera estudios.
¿Cómo vivió estos dos meses?
Afortunadamente le doy gracias al Eln, a pesar del secuestro, de lo difícil que es dormir con una cadena y con la rabia que da, siempre me dieron el café de primero, la comida primero, siempre estaban pendientes de mí. Pero es una situación muy difícil.
¿Cómo se dio cuenta de que iba a estar en libertad?
Hace 15 días que supe que me iban a liberar y de ahí fueron 14 días de travesía, de recorridos. Me liberaron cerca de Norte de Santander, por los lados la vereda San Pablo.
¿Cuál grupo del Eln?
Sé que fue el Frente Camilo Torres, en la zona del Cesar y del Catatumbo, nos movilizamos por unas veredas de Norte de Santander.
¿Temió por su vida?
No hay necesidad de que estén apuntando si sabes que hay personas con fusiles AK47, granadas y pistolas, y nunca pasé más de cinco minutos solo, siempre me tenían con control visual.
¿Qué pensaba en esos dos meses?
Psicológicamente traté de prepararme. Mis compañeros preguntaron por cuánto tiempo me iban a tener y dijeron unos tres días, y yo supe que eso se iba a ir más largo. No había comunicación para decir que me tenían de secuestrado. Pasaron varios días así. Después supe que el 4 de julio celebraban 50 años de aniversario y supe que no iba a ser ese día. Van pasando los días y días y uno trata de resistir. Dentro de la profesión uno sale a campo y está acostumbrado a estar en el monte. El primer mes traté de llevarlo, pero cuando cumplí los primeros 30 días dije que es el mayor tiempo que he estado por fuera. Uno psicológicamente dice hasta 60 días, hasta 60 días y lo repite. Sabía que el ingeniero ambiental de Medellín había estado retenido y que hay personas que retienen por cuatro o cinco años.
¿Qué le dijeron cuando lo liberaron?
Simplemente enviaron a unos emisarios y dijeron lo vamos a liberar y vamos a movernos. Estuvimos 14 días así, luego compartimos con el comandante y dijo que me liberaban porque no estaba haciendo nada en el ámbito minero o energético, que en realidad estaba haciendo algo para el pueblo.
¿Estaba esposado?
Estuve encandenado en un pie, 30 días con una cadena. No se lo deseo a nadie. Era una cadena gruesa, me la ponían con un candado y la aseguraban con una cadena como de 12 metros y le daban la vuelta a la cama.
Un mensaje a la guerrilla...
Primero las gracias por conservarme la vida, mi integridad y el trato respetuoso que me brindaron. Si hubiese sido hostil créame que hubiera intentado volarme.
¿Qué siente al llegar?
Muy contento y relajado.
¿Seguirá ejerciendo?
Sí.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015