LA PATRIA | MANIZALES
La quebrada La Pitala tenía a un lado del cauce más agua que en el otro. Esta fue la señal con que el encargado de la bocatoma de Victoria avisó a las autoridades, el pasado 28 de julio, sobre robo del líquido que abaste a los victorianos.
Las razones eran que el caudal del afluente se redujo debido al verano y que alguien de la vereda Marzala perforó la tubería de agua potable para continuar abasteciéndose de la quebrada, así lo aseguró Diego Fernando Vargas, administrador seccional de Empocaldas.
Vargas visitó el lugar en compañía de la Policía para verificar si correspondía a una perforación ilegal. En el sitio encontraron que la tubería de 8 pulgadas estaba rota, de la que salían en promedio tres litros de agua por segundo.
Cuatro días después, el viernes pasado, instalaron un collarín para solucionar la fuga. Es decir, que en cinco días se perdieron un millón 296 litros de agua, para abastecer a unas 6.200 personas en un solo día.
Cuando restablecieron el servicio de la tubería, esta estalló y el municipio tuvo cortes de agua por sectores y por horas, durante el sábado y el domingo.
Vargas, quien interpuso una denuncia, aseguró que los daños fueron en desestabilización de la conducción y racionamiento.
Las autoridades policiales de Victoria aseguraron que investigan lo sucedido, además preguntaron a la comunidad de Marzala, donde les afirmaron que no causaron daños a la tubería y que esa perforación lleva unos dos años, pero que no lo habían notado hasta que mermó el caudal.
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