Al cura que mató a su novia y a su hija le doblaron la condena

A 45 años y 10 meses de prisión condenó un juez de Belén de Umbría (Risaralda) al sacerdote Francey Díaz Toro, por el asesinato de su novia, María del Carmen Arango y su hija, María Camila Díaz, de 5 años.

La condena inicial fue de 23 años, pero el Tribunal Superior de Pereira anuló el preacuerdo que permitió rebajar la pena a la mitad y ordenó reiniciar el juicio. El Tribunal dictaminó que no merecía dicha rebaja. La nueva sentencia fue apelada por la defensa del exsacerdote, pues la consideró excesiva.

El crimen ocurrió en Mistrató (Risaralda) en febrero de 2007, donde estaba asignado el exclérigo. Los cuerpos los hallaron cerca de Anserma (Caldas) cuatro días después. Tres meses duró su identificación debido a que el sacerdote, con ayuda de un sepulturero los incineraron.

Por este hecho la Iglesia Católica esta avocada a pagar una indemnización de 600 millones de pesos a los 10 hermanos y la mamá de María del Carmen.