LA PATRIA | MANIZALES

El minero Jhon Fredy Ortiz Rodríguez, de 48 años, no solo se emborrachó, sino que le dedicó la rasca a dos ciudadanos y a dos policías que intentaron calmarlo. El caso fue en Marmato en la noche del 18 de mayo del 2020.

El patrullero Guillermo Enrique Galeano Barragán y el auxiliar Esteban Augusto Bueno Tapasco recibieron una llamada al número del cuadrante de la Estación de Policía de El Llano, donde un ciudadano les informa que en el sector de Guayabito, en La Virgen, había varias personas en la calle, en plena pandemia, consumiendo bebidas embriagantes y con un equipo de sonido a alto volumen.

Se dirigieron al lugar y observaron una aglomeración de personas que, al percatarse de la presencia policial, apagó el equipo, pero continuó en el sitio. Estaban incumpliendo el toque de queda y el aislamiento preventivo obligatorio. Unos se alejaron, excepto otros que bebían licor, entre ellos Jhon Fredy.

Según se relata en el proceso, comenzó a insultar a unas personas por una copa de licor, sacó un arma cortopunzante y agredió a dos ciudadanos con los que discutía. Otros presentes empezaron a gritar alterados, por lo que el patrullero Guillermo Enrique trató de controlarlo, sin éxito. Debió usar la fuerza para esposarlo, pero en el forcejeo cayeron. El alterado hombre apuñaló al uniformado en la pierna derecha y después arremetió contra el auxiliar Esteban Bueno Tapasco, a quien lesionó también en brazo y pierna. Jhon Fredy trató de huir, pero lo atraparon.

Proceso

El 19 de mayo de 2020, el Juzgado Promiscuo Municipal de Marmato presidió la audiencia preliminar. No aceptó cargo y tampoco pidieron medida de aseguramiento.

El 23 de noviembre pasado se dio a conocer un preacuerdo en el que se le reconoció al sujeto el atenuante de la ira e intenso dolor, pactándose una pena de 18 meses de prisión por violencia contra servidor público. El Juzgado Penal del Circuito de Riosucio, tras considerar que se ajustaba a la legalidad, lo aprobó.

Debe pagarlos en prisión, pues al revisar su historial delictivo se encuentran dos sentencias condenatorias proferidas por ese mismo Despacho por tentativa de homicidio agravado, sancionado en diciembre 13 del 2016 con 33 meses y 10 días de prisión, con suspensión condicional de la ejecución de la pena. La otra por tráfico, fabricación o porte ilegal de armas, condenado a 8 años y 3 meses de prisión. Estaba en domiciliaria en el momento de los hechos, por lo que se pidió revocarle ese beneficio.

No le ha servido

“Se niega cualquier subrogado o beneficio, menos cuando Jhon Fredy ha dado evidente muestra de que su proceso de resocialización no le ha servido por mucho, no aprovecha las oportunidades entregadas por la Judicatura para acometer contra otros postulados legales, para desafiar los compromisos adquiridos cuando se le envió a su domicilio a cumplir una sanción. Es imperiosa y urgente la necesidad de remitirlo a los patios carcelarios para que reconsidere y reflexione sobre su comportamiento en sociedad”, concluyó el juez.