$150 millones invirtieron delincuentes en túnel en Alta Suiza

LA PATRIA | Manizales

Las letras del aviso del local Pañales y Sillas Plásticas empezaron a ser desmontadas ayer en la mañana. La razón: el hallazgo de un túnel subterráneo con el que delincuentes pretendían hurtar por lo menos $60 mil millones de la compañía transportadora de valores G 4, a una cuadra de ese lugar en el barrio Alta Suiza, de Manizales.

Cómo lo publicó LA PATRIA ayer, la Policía Metropolitana se encargó de frustrar el robo e informó que el túnel tenía 40 metros de longitud. Este medio conoció que en total eran 10 hombres los que trabajaban en la estructura. Estuvieron a cinco metros de quedarse con el botín.

La institución uniformada indica que de acuerdo con las investigaciones preliminares y documentos encontrados en el lugar, al parecer, los delincuentes invirtieron por lo menos $150 millones. Los recursos los enfocaron en la construcción del sofisticado túnel.

Por debajo
Las medidas del corredor bajo tierra son de 60 centímetros de ancho por 80 centímetros de largo. Al suministrarle estos datos a un ingeniero civil, consultado por LA PATRIA, señaló que la dimensión del túnel era de 19, 2 metros cúbicos y que ese era el porcentaje de tierra que sacaban, el cual ascendía a 25 metros cúbicos aproximadamente al montar la tierra en una volqueta.
"La cifra asciende porque la tierra se expande al cambiar de sitio, se riega por así decirlo. Teniendo este último dato sabemos que en total los delincuentes hicieron cuatro viajes en volqueta de 7 metros cúbicos cada uno", explicó.

Los inicios
Meses atrás personas tomaron en arrendamiento, a través de una inmobiliaria, una bodega ubicada en la carrera 19 # 72- 40 de ese sector, al lado del restaurante Mazorca Colombiana, para adecuarla y poner un negocio de pañales y sillas plásticas.
Para que los clientes no se dieran cuenta de las verdaderas intenciones, los asaltantes construyeron una pared en superbord, en donde supuestamente guardarían el surtido, pero en realidad empezarían a excavar.

"Ellos querían primero darse a conocer dentro del barrio, pero en los últimos meses dejaron de vender los productos, de todas maneras había movimiento en el lugar y eso llamó la atención de los ciudadanos", dijo un investigador.

A eso se le suma el ingreso de un carro a altas horas de la noche a la bodega. Al parecer, en el vehículo transportaban la tierra que sacaban, y esto provocó que los habitantes avisaran a las autoridades, que  comenzaron a vigilar encubierta el sector. 

El hallazgo
Una vez la Metropolitana ingresó al negocio el martes en la noche lo encontró desocupado con uno que otro colchón. Detrás de la pared fabricada, había en el suelo un bloque cuadrado de cemento. Al moverlo, los policías hallaron el profundo agujero.

El coronel Mario Fernando Guerrero, comandante de La Metropolitana de Manizales y Villamaría, informó que a través de esa fachada los asaltantes querían pasar desapercibidos y que quienes elaboraron el túnel saben de ingeniería.

“Por lo menos llevaban un año y tres meses haciéndolo. Son buenos los resultados que dan los hombres adscritos a la Metropolitana. Hubo un trabajo mancomunado con la Administración Municipal e igualmente  con la ciudadanía,  a través de sus importantes informaciones”, dijo. 

Asimismo, señaló que trabajan para dar con el paradero de los delincuentes.

Entre los métodos de exploración técnica de este operativo se destaca la utilización de un vehículo especializado en la visibilización a grandes profundidades que ofreció  Aguas de Manizales.
También la presencia de los organismos socorro fue crucial para determinar las características reales del túnel. Por ahora los investigadores de la Policía, observan las cámaras de seguridad y hablan con los habitantes para  recolectar más datos.

Añadieron que la bodega por el momento está bajo custodia de las autoridades y que analizan los documentos de alquiler que recibió la inmobiliaria para aumentar las pistas.

Antecedentes
En 1997 LA PATRIA publicó un hecho similar ocurrido en una vivienda en el barrio Palermo. El afectado fue el comerciante Farid Mustafá Tamayo. A él le hurtaron 220 kilos de oro y 60 mil piezas de piedras preciosas que tenía guardadas dentro de una bóveda en su casa. Para llegar hasta ella los delincuentes se hospedaron en dos casas contiguas a la de él y construyeron el túnel que los conectó con la bóveda.