El coliseo del Instituto Universitario se convirtió en una sala de urgencias. Simuladores de bebés y personas adultas, de contextura, talla y peso de un ser humano, les sirvieron a 85 alumnos de grado once para aprender sobre maniobras de reanimación cardiopulmonar.
El anestesiólogo Juan Felipe Valencia impartió la orden. "Ubíquense hacía un lado del paciente, le doblan la mano por encima del hombro, le levantan la rodilla, le cruzan la otra mano y lo giran hacia el lado contrario. Con esta maniobra evitan que la persona se broncoaspire", explicó.
En la jornada, que se llevó a cabo el viernes, participaron 10 instructores de anestesiología y ocho estudiantes de medicina de la Universidad de Caldas. Su interés se concentró en enseñarles conceptos de atención de emergencias y primeros auxilios. La Universidad Autónoma y el SES Hospital de Caldas prestaron sus equipos para las muestras.
"La maratón de reanimación cardiopulmonar hace parte del Día del Anestesiólogo, que se celebra el 16 de octubre, y está incluida en la celebración de los 60 años de la Sociedad Caldense de Anestesiología (SCA) y de los 50 años del posgrado de anestesiología de la Universidad de Caldas", comentó el especialista.
Agregó que la Sociedad cumple con la responsabilidad social que cualquier gremio tiene y pretenden llevar a grupos de impacto saberes básicos de atención en salud. En
"Hace un mes realizamos una actividad similar con docentes de colegios públicos de la ciudad. Se han hecho jornadas con madres comunitarias, profesoras de jardines infantiles y meseros de restaurantes, para que se entrenen en técnicas de despeje de vía aérea que se da por ahogamiento", destacó.
Perder el miedo
El anestesiólogo Juan Felipe Valencia advierte que existe el mito de que cuando una persona sufre un desmayo o un paro cardiorrespiratorio no le ayudan por las consecuencias legales negativas que acarrea. Sin embargo, invitó a la comunidad a tener en cuenta cuatro aspectos:
1. La primera ayuda que puede prestar son sus manos y la buena intención.
2. Pida ayuda por teléfono o a una persona cercana para que se comunique con un servicio de emergencia médica.
3. Mientras llega personal capacitado, haga compresiones tóxicas y acompáñelas con respiración boca a boca.
4. Si tiene al alcance un desfibrilador automático, proceda a usarlo si analiza que la persona perdió el pulso. En Manizales hay 10 equipos distribuidos en puntos de afluencia masiva.
Aprendieron
* José Luis de los Ríos
Es una excelente actividad. Desde jóvenes hay que aprender que estas situaciones se pueden presentar en cualquier momento y no tiene que ser uno de nuestros familiares para poderlos atender.
* María Fernando Ríos
Nos ayudó a actuar en casos de emergencia.
* Santiago Cardona
Nos enseñaron cómo ayudar ante casos de emergencia, cuando alguien se desmaya o sufre un paro.
* Juan José Restrepo
Es muy bueno que el colegio nos permita hacer actividades de este tipo y que la gente de las universidades nos enseñen tantos saberes.
* Óscar Gálvez
Nos ayudó a saber qué hacer en un caso de emergencia cuando un compañero o familiar necesita ayuda.
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