Ellas se deprimen más

Vanessa Sánchez

Santa Marta | LA PATRIA

Atravesar por una situación difícil como una ruptura amorosa, la pérdida de un ser querido o de un empleo puede alterar los nervios de cualquier ser humano. Pese a esto, más allá de la ansiedad que se genera, estos episodios se superan con el paso del tiempo y con voluntad y no deben ser motivo de mayor preocupación.

No obstante, hay que estar alerta frente a señales como la pérdida del sueño o del gusto por lo que antes causaba placer, estos son los primeros indicadores para buscar ayuda médica. César Augusto Arango, psiquiatra y PhD. en neuronciencia de la Universidad del Valle, explica que las mujeres se deprimen más por los cambios hormonales que empiezan desde el primer periodo menstrual.

LA PATRIA entrevistó al experto en el Taller para periodistas de Salud, liderado por Pfizer y explicó las causas y el tratamiento de la depresión.

¿En qué momento la depresión se vuelve una enfermedad?

Cuando la persona trae una dinámica normal con su familia, en su trabajo y sus hobbies y se sale de control a causa de la depresión, en ese momento se considera que padece de esta enfermedad. Sin embargo hay tres síntomas que revelan que ya es una patología. La primera es la alteración del sueño, cuando hay ansiedad y depresión el sueño se altera significativamente, ya sea porque se demora en dormir, tiene un sueño intranquilo o se despierta varias veces en la noche. Lo segundo es que todo lo que sea placentero, como el deseo de comer o de tener actividad sexual, se pierde. El tercero es que se alteran los niveles de concentración, tienen cambios emocionales bruscos, no memorizan bien y se vuelven muy irritables.

¿Por qué las mujeres se deprimen más?

Ellas tienen mayor vulnerabilidad a los trastornos depresivos durante la edad reproductiva, entre los 15 y 44 años. En este tiempo las mujeres asumen más roles y responsabilidades, están más expuestas a experiencias sexuales, abuso sexual y violencia doméstica. Los factores endocrinos relacionados con el ciclo reproductivo pueden jugar un papel importante e incrementar la vulnerabilidad a la depresión. Los estrógenos y la progesterona han mostrado sus efectos sobre los sistemas neurotransmisores y neuroendocrinos, implicados en los trastornos del humor.

¿Qué pasa en el cerebro de una persona deprimida?

Cuando hay depresión en el cerebro no hay neuroregeneración ni se conecta como debe ser. En términos coloquiales entra en un estado de debilitamiento y agotamiento y es muy importante recalcar que no es por falta de vitaminas, sino porque hay un problema interno que necesita asesoría médica.

¿Cuándo acudir a un tratamiento médico?

En el momento que la persona por más voluntad que tenga y se lo proponga no lo logre, ahí hay que hacer un acompañamiento médico y psicológico. Estas personas pueden entrar a estados que pueden llevar incluso a ideas suicidas y por eso los antidepresivos deben ser manejados bajo prescripción médica. Una persona sumida en una depresión luego de tomar la medicación puede tener impulsos de quitarse la vida.

¿Para qué personas son indicados ?

En algunas ocasiones hay depresiones crónicas recurrentes, por eso si no están con el antidepresivo no van a poder estar bien. No obstante hay otras personas que pueden experimentar un cuadro depresivo una vez en la vida, se tratan durante un año y medio, y luego de suspender el medicamento quedan bien.

Manejo médico

¿Cuando es recomendable suspender la medicación?

El uso y la suspensión de antidepresivos o cualquier medicamento que tenga una repercusión en el sistema nervioso debe ser siempre bajo vigilancia médica. En este caso el psiquiatra es quien determinará si ya no es necesario tomarlos. Estos medicamentos pueden tener efectos adversos, por ejemplo, la fluoxetina produce hiponatremia, es decir, baja el sodio en la sangre. Por eso a pesar de que son de venta libre, su consumo y su suspensión debe ser indicada por un médico.

¿Qué consecuencias tiene abandonar el tratamiento?

El mayor problema es la adherencia a los tratamientos y las creencias que existen alrededor de los medicamentos psiquiátricos, porque se cree que generan adicción. El antidepresivo se demora tres semanas para actuar y ya se sienten bienestar. Lo ideal es continuar con la medicación de 12 a 18 meses para que el procesos de neuroregenación permanezca en el tiempo. Suspenderlo implica que al mes y medio aparezca de nuevo la depresión, por lo que hay que iniciar de nuevo con las pastillas.

¿Estas patologías se pueden prevenir?

Con hábitos de vida saludables es probable, sin embargo, si la persona tiene tendencia familiar a la depresión, puede desarrollarla ante un factor estresante, o si fuma y consume licor.

¿Cómo está Colombia frente a otros países?

En el país las cifras son preocupantes en relación con otras naciones. La ansiedad y la depresión en Colombia ocupan el tercer lugar de trastornos en el mundo, corresponden al 19%.

Ansiedad versus depresión

La ansiedad es un síntoma que se asocia con el miedo, es decir, la persona se muestra inquieta, temblorosa, con taquicardia, se come las uñas y tiene pensamientos catastróficos. El depresivo en cambio entra en episodios de anedonia, que significa la pérdida del gusto por las situaciones que antes generan placer, es apático, desinteresado, pierde la esperanza por todo, no quiere levantarse de la cama.