LA PATRIA | Manizales
Luis Eduardo Bedoya y Ana María Marín se declararon ayer víctimas del mal servicio de Coomeva EPS. No se conocen, pero ambos refieren demoras en la prestación del servicio. Él tiene cáncer linfático con compromiso de médula ósea y un tumor cerebral, por lo que pide lo atiendan en la ciudad; ella espera desde abril una arteriografía, que está aprobada y no agendan.
Bedoya, de 36 años, señaló que se está muriendo por la negligencia de Coomeva: "Recibí una llamada de un abogado de la EPS. Me advirtieron que a partir de hoy (miércoles) no se hacían cargo de mi ni de lo que me pasara. Me señalaron que me debo tratar en Pereira y ahí están desconociendo la orden del juez. No es un capricho mío, esa decisión la tomó basado en una recomendación médica".
El paciente interpuso una acción de tutela alegando la necesidad de que lo atiendan en Manizales y no en Pereira como sucede. Un juez le negó el recurso en primera instancia, pero insistió y la respuesta se dio a su favor. Ya se cumplieron las 48 horas para que la EPS acatara la medida. El paciente presentó el escrito para que iniciaran el incidente de desacato, el juez se pronunció otra vez dando dos días para el cumplimiento, tiempo que se cumplió ayer.
Calificó de desconsoladora la llamada de la EPS, pues está pasando por alto la consideración de un neurólogo que le impide trasladarse a la capital de Risaralda. Dijo que seguirá en su lucha.
Hace dos meses Luis Eduardo convulsionó y fue remitido a un centro de atención donde le detectaron un tumor cerebral. Ahora está en su casa, porque para tratarlo requiere de un centro oncológico especializado. Tiene diseminadas unas masas por varias partes del cuerpo, además, su vesícula está obstruida, por eso no puede alimentarse y solo ingiere un suplemento nutricional.
"Necesito la cita con un hematólogo de la ciudad, que determine el tratamiento a seguir. Aquí si hay donde atenderme, sería en Oncólogos de Occidente", concluyó el paciente.
Coomeva respondió que "en todo momento se le han prestado los servicios requeridos al usuario en la Clínica San Rafael de Pereira".
Sobre la decisión del juez mencionó: "La EPS adelanta las gestiones administrativas con una institución de Manizales, que preste los servicios que el usuario necesita. No obstante, es potestativo de dicha entidad prestar este servicio, lo cual se le explicó de manera directa al usuario".
Al borde del colapso
Ana María Marín, de 67 años, padece una enfermedad pulmonar bronco obstructiva e hipertensión pulmonar y arterial. Estas dolencias la llevan a producir trombos espontáneos, que podrían llegarle al cerebro y al corazón. Aseguró que los medicamentos ya no le sirven, por eso pide le agenden -en el menor tiempo posible- una arteriografía (radiografía de los vasos sanguíneos de una zona determinada del organismo).
Sobre el caso de Ana María, Coomeva informó que se encuentra realizando las gestiones pertinentes para la emisión del pago de la especialidad correspondiente y así proceder al otorgamiento de la cita para la usuaria. Dijo que continuará aunando los esfuerzos necesarios para garantizar la atención integral en salud que requiera.
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