A 200 personas las vacunaron ayer en El Bajo Tablazo

B. Eugenia Giraldo

LA PATRIA | MANIZALES

170 personas mayores de 60 años madrugaron ayer para cumplir una cita en la capilla La Sagrada Familia del Bajo Tablazo. No iban para misa y tampoco a escuchar un sermón. Querían cumplir con un deber sagrado con su salud, vacunarse o como dijo un asistente: “hacerle el quite a la covid-19”.

A José Alcides García Gaviria, del sector Aventino, su hijo le dijo que si quería la vacuna debía madrugar y sin aclarar aún la mañana se levantó. “A las 3:00 de la madrugada me bañé y tomé unos tragos, luego me puse en camino a la capilla y llegué como a las 5:00 cuando se asomaba el día”. Quería ser el primero, pero le ganaron otras seis personas.

Jornada

La enfermera jefe Tatiana María Henao Céspedes estuvo a cargo de esta jornada, como lo hizo con las dos anteriores en el Kilómetro 41 y en La Cabaña.

Ella relata que a las 6:30 de la mañana repartieron 170 fichas, pero fue tal la aceptación a la convocatoria que la Secretaría de Salud programó otra jornada para el 20 de mayo. “Ha bajado gente de Manizales, de Chinchiná, Viterbo, Riosucio, Supía, de todas partes. Esperábamos que llegara la gente del sector rural de El Tablazo, pero no, también llegaron de La Siria y El Alto del Naranjo”.

Para acceder a este servicio de vacunación la persona debe estar priorizada en el aplicativo mivacuna y tener la EPS activa en ADRES, porque sin afiliación no pueden vacunar. “Buscamos vacunarlos a todos desde que cumplan con los criterios”, precisa la enfermera Tatiana.

De ahí el llamado que hizo la Secretaría de Salud porque en Manizales hay 118 personas que no tienen ninguna afiliación al Sistema general de seguridad social en salud y se requiere que elijan la EPS, para que puedan tener acceso a los servicios médicos y a la vacuna contra la covid-19.

Espera

Don Alcides salió a las 9:00 de la mañana de la capilla, se notaba contento y les decía a los de la fila que no había sentido dolor. “Desde diciembre estaba esperando una vacuna, es mejor el chuzón que estar a la intemperie, aunque aún hay gente que le gusta meter miedo”.

Así como el templo se fue llenando en la mañana, eso sí, respetando cierta distancia, entre charla y charla pasaron las horas. A las 2:40 de la tarde ya estaba más vacío, es seguro que alguna persona mayor de 60 años, que esperaba el llamado para la vacuna, alcanzó a entender que ayer en ese puesto de salud improvisado también podía orar.

"Todos salieron satisfechos, el único que faltó por vacunar fue el sacerdote, porque tiene 43 años”, concluye la enfermera.

Jesús Antonio Castañeda

Es mucha satisfacción, al menos el Gobierno está haciendo algo por el pueblo. Es un poquito demorada, pero es una buena labor.

Carlos Arturo Bedoya Mejía

Estar vacunado es una responsabilidad personal y también grupal. Creo que todos buscamos estar ilesos de este covid-19.

Tres jornadas

Área rural  Vacunados

* Miércoles en La Cabaña  200

* Jueves en el Kilómetro 41  160

* Viernes en el Bajo Tablazo  200