MARTHA LUCÍA GÓMEZ
LA PATRIA | MANIZALES
Al abogado pereirano Pablo Julio Cruz Ocampo ya no le afecta que le digan militante de las Farc. No lo es, pero desde diciembre del año pasado integra la organización Voces de Paz, grupo de seis ciudadanos con asiento en el Congreso de la República como veedores en la implementación de los acuerdos.
En diciembre del año entrante cumple 70 años y dice que cuando termine este encargo de Voces, a finales de noviembre próximo, sentirá que dio su aporte a que se consolide la paz y que a las nuevas generaciones no les toque atravesar el escenario terrible y espantoso que le tocó a él: el de la guerra.
Fue invitado a la Cátedra de la Paz, de la Universidad Nacional sede Manizales, para hablar sobre el reconocimiento político de este grupo insurgente.
Cruz Ocampo es especialista en Derecho Constitucional, ha sido docente universitario, decano de Derecho de la Universidad Autónoma de Bogotá, notario en esa ciudad durante dos años, y experto delegado para acompañar la creación del Estatuto de Oposición como parte de las negociaciones Gobierno-Farc.
Retrasos del Gobierno
- ¿Cómo va la implementación de los acuerdos?
Se destaca la decisión inequívoca de la insurgencia de las Farc de cumplir todo lo pactado. Se concentraron, se desmovilizaron, entregaron las armas, entregaron un inventario de lo que tienen y van en marcha a constituirse en un partido y movimiento político. Eso lo reconoce hasta el más rotundo adversario.
- ¿El Gobierno ha hecho lo mismo?
Lamentablemente no ha cumplido a plenitud, los compromisos han estado más retrasados. Sin embargo, eso no ha cambiado la vocación decisiva de la insurgencia por cumplir los acuerdos.
- ¿Qué es lo más retrasado y lo más urgente?
El proceso de implementación por la vía legal y de las reformas a la Constitución tiene pocos adelantos en el Congreso. Y es lamentable a esta altura, se requería que ya estuvieran en marcha muchos compromisos de lo pactado en La Habana. No ha sido fácil este trámite en el Congreso. Es urgente, por ejemplo, que entre en funcionamiento la Justicia Especial para la Paz (JEP) a través de la aprobación de la ley estatutaria, que implementa el funcionamiento de la JEP como un instrumento valioso para conseguir la paz en Colombia.
- ¿Qué esperan del Gobierno?
Que pueda sumar y agrupar sus mayorías para garantizar que se cumpla la implementación de los acuerdos. Estamos atentos a que los congresistas de Caldas apoyen este proceso, y se lo hagan conocer a sus electores, o de lo contrario que los electores sepan que sus congresistas no han estado a la altura.
Dos bandos
- ¿Quiere decir que el fast track no ha servido?
Lamentablemente hay una interpretación de la Corte Constitucional, que respeto, pero no concuerda con el propósito de la paz, determinando que este sistema suplantaba la Constitución porque reducía la participación del legislativo, lo cual no corresponde a la realidad. Además, la debilidad de los partidos políticos que conforman las mayorías del Gobierno se ha convertido en un obstáculo. Esperamos que la voluntad del presidente Santos, expresada en cumplir lo pactado, el compromiso y la vocación a nivel internacional a la expectativa de que el Gobierno cumpla, se haga realidad.
- La JEP ha sido muy criticada por las fuerzas militares, al considerar que llevará a la impunidad, ¿qué piensa?
Puedo decir desde ya que la solución a los conflictos que haya en el mundo a partir de ahora, tendrán como mínimo un componente de justicia, verdad y reparación y de no repetición al estilo de la JEP de Colombia. Deben comparecer allí los que han intervenido en el conflicto, con responsabilidades en las graves violaciones de derechos humanos y al Derecho Internacional Humanitario. Por el lado de la insurgencia, no hay duda, están dispuestos a comparecer y a contar la verdad, pero resulta que en la guerra hubo dos bandos. Se invisibilizó uno, incluso se le tildó de héroes, pero la presidente de la Corte Penal Internacional comunicó al Gobierno de Colombia que 23 oficiales, generales del Ejército y de la Policía, están en la mira de esta Corte. Si no hay justicia frente a la participación de estos oficiales en el conflicto, va a intervenir. De modo que no hay tal que en la JEP habrá impunidad, lo que pasa es que despierta mucho temor porque quienes han vivido de la guerra y se han beneficiado de ella tienen que decir la plena verdad, y por lo tanto tratan de desprestigiar el mecanismo. Esperamos que estos oficiales entiendan que es mejor ir a la JEP, contar la verdad y asumir las consecuencias de sus actos.
- ¿El otro bando, las Farc, estarían dispuestas a contar la plena verdad de las atrocidades que cometieron y asumir las consecuencias?
Lo que sí sé, porque lo he escuchado, es que los insurgentes van a contar todo, pleno, total, sin ambages, sin esguinces. Y desde ya han asumido la conducta de pedir perdón a las víctimas, están en el proceso de reparación. No podría responder qué dirán los oficiales y los miembros del otro bando, que cometieron peores y más crímenes que los de la insurgencia.
Farc en la política
- Dice que las Farc han cumplido con todo, pero se les critica la demora para entregar a menores de edad que tenían en sus filas...
La insurgencia ha hecho todo para cumplir ese compromiso. Son diferentes escenarios ocurridos. Muchas personas que están en la insurgencia y que siendo menores ingresaron a ella como salvavidas porque sus familias fueron fusiladas, masacradas por paramilitares o por la fuerza pública, no tienen idea si son mayores o menores. Lo otro es que hay un número muy reducido que no está al alcance de que la insurgencia quiera retenerlo, ya eso se acabó; ya cuál guerrilla, se acabó, no existe, se desmovilizó, ya no tiene armas.
- Se empezó a discutir el proyecto de reforma política, ¿qué solicitan las Farc frente a esta reforma?
Lo que se pactó con las Farc y se puede destacar es el Estatuto de la Oposición, que ya es ley y no es para las Farc, es para garantizarles los derechos a todos los sectores políticos alternativos a quien no esté en el Gobierno. Sobre la reforma lo que se ha planteado es que se haga más transparente el sistema político, que se establezca el voto electrónico y unos límites de financiación particular a las campañas, ayudas ojalá estatales para la acción política.
- ¿Las Farc quedarán con el mismo nombre, como partido, de cara a las elecciones a Congreso en el 2018?
El tema es objeto de debate de la insurgencia desmovilizada y desarmada, que en su congreso, que se iniciará el 27 de este mes y terminará el 1 de septiembre, decidirá si es un partido político o un movimiento, sus estatutos, su programa y su nombre. Hasta ahora se han escuchado varias propuestas.
- En cuanto a candidatos. ¿Se ha dicho que Timochenko e Iván Márquez podrían estar en la lista, pero la JEP se los permitiría?
Lo que se pactó es que en ningún caso los liderazgos de la insurgencia y su compromiso e intervención en la JEP, los inhabilita políticamente, en tanto cumplan con sus principios. Si Timochenko va a JEP y no dice la verdad, lo van a condenar a una pena de hasta 20 años y no podrá ser candidato. Si Timochenko, Iván Márquez, Pablo Catatumbo van a JEP, cuentan todo, plena verdad, se comprometen con las víctimas, se comprometen a no repetir, son acreedores de las penas restaurativas que establece el modelo, y en ese caso estarían habilitados políticamente para intervenir.
- ¿De contar la plena verdad, son conscientes de que tendrán menos electores?
Ese es el costo de obtener una pena restaurativa. Estoy seguro que va a producir unos impactos, pero también producirá otros contrarios porque va a demostrar que hay sinceridad, compromiso, que están decididos a reconciliarse con el país.
"Lo que han dicho las Farc es que no van a presentar candidato, pero que sí crearán una gran convergencia de distintas fuerzas que permitan encontrar un candidato que simbolice la aspiración de continuar con el proceso de paz y responda a las necesidades de la población".
"Son un riesgo, que tiene que ver mucho con la implementación de los acuerdos. Si el Gobierno no se ajusta a lo pactado, si no cumple, escenarios como los de la disidencia u otros más lamentables y peores se van a presentar".
"Aparece como organización transitoria, reconocida por el Consejo Nacional Electoral, para facilitar la reincorporación de la insurgencia a la vida política, legal y abierta. Estaremos hasta que se funde o se le otorgue personería al nuevo partido que conformen las Farc, pero vamos a estar hasta finales de noviembre en el Congreso acompañando la implementación de los acuerdos".
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