Luego de su huida cinematográfica desde Venezuela el pasado viernes para llegar a Aruba y luego a Colombia, donde permaneció cuatro días, la exfiscal venezolana Luisa Ortega (y su esposo, el diputado Germán Ferrer) pasó por Panamá y está ahora en Brasil, donde reveló que tiene pruebas contundentes de la vinculación de Nicolás Maduro y su gobierno con los escándalos de corrupción de Odebrecht, lo que en ese país ha implicado que no se construyan algunas líneas de metro, varios puentes y carreteras y una gran hidroeléctrica, entre cerca de 30 obras que llegan a cifras astronómicas de recursos comprometidos. Solo las coimas ascenderían a los 98 millones de dólares.
De manera casi simultánea, el gobernante venezolano aseguró que le pedirá a la Interpol que emita un código rojo para la captura de la exfuncionaria, por considerarla responsable de delitos en su país. Es una guerra interna entre chavistas y exchavistas que trasciende las fronteras de un país en franca decadencia, que cada vez está más lejos de la democracia, que se ha venido convirtiendo en un factor desestabilizador de América Latina, y que podría volverse escenario de forcejeo entre los Estados Unidos y países como Rusia y China, que han apoyado económicamente a Maduro.
La posición del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, de ofrecer asilo a Ortega si llegara a solicitarlo llevó a que los líderes del régimen vecino se vinieran lanza en ristre en contra de Colombia, calificándonos como "el Caín de América", y el centro de operaciones de la conspiración internacional contra Venezuela. Lo ocurrido en las últimas horas calienta el ambiente de las relaciones entre los dos países, y conociendo la manera de actuar de Maduro y quienes los rodean no podría desestimarse algún tipo de nueva agresión, por lo que es fundamental mantenerse atentos.
En el caso específico de la señora Ortega, desde cuando optó por darle la espalda a Maduro al no estar de acuerdo con sus abusos en el poder, ella ha venido sufriendo una escalada de persecución que hoy la tendría en mayores dificultades en su país, si no emprende la huida. Cuando a principios del año viajó a Brasil para reunirse con los demás fiscales del continente para tratar el escándalo de Odebrecht, debió abandonar intempestivamente la reunión debido al secuestro de su hija y su nieto en Caracas; y posteriormente, fue destituida de su cargo por la Constituyente de Maduro, a la cual Ortega se opuso de manera férrea. Eso la lleva hoy a decir que "en Venezuela el derecho ha muerto".
Estados Unidos, que está llamado a ser líder del continente, ha tomado algunas medidas de sanción económica a funcionarios del gobierno de Maduro, pero aún no se decide a endurecerse frente a la compra de petróleo venezolano, por ejemplo, el cual llega al país norteamericano en condiciones bastante competitivas. En una salida que ha sido considerada inadecuada, el presidente Donald Trump amenazó con una intervención militar, lo que le ha dado más ínfulas a Maduro para considerarse perseguido. No obstante, ante los hechos recientes, se esperan decisiones más severas que afecten el bolsillo del gobierno chavista.
El panorama no es fácil, porque entre más se apriete a Venezuela se le podrían estar dando más alas a Rusia y China en nuestro continente, y desde un punto de vista geoestratégico se correrrían nuevos riesgos. Lo ideal sería que, mientras es posible edificar un escenario que permita una salida democrática a Venezuela, las sanciones económicas sean muy selectivas, de tal manera que se debilite el régimen pero no se afecte al pueblo venezolano. Por lo pronto, y frente a lo que le ocurre a la fiscal Ortega, debe ser mucho lo que ella sabe para preocupar tanto a Maduro y su gente. Ojalá salgan todas las verdades y muy pronto pueda regresar la normalidad al vecino país.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015