La Universidad Católica de Manizales (UCM) arranca su año académico con el pie derecho, con la gran noticia de su más importante logro desde que fue creada hace 66 años. Alcanzar la Acreditación Institucional de Alta Calidad, de acuerdo con la Resolución 013600 del 9 de diciembre del 2019, emitida por el Ministerio de Educación Nacional (MEN), es la ambición de todo centro de educación superior en el país, donde solo hay 55 que tienen este reconocimiento de las 290 universidades que existen en Colombia. Es motivo de orgullo para la capital caldense que en ese club de 55 instituciones haya 5 en Manizales acreditadas de alta calidad.

Debemos recordar que en el 2007 esa misma acreditación fue alcanzada por la Universidad de Caldas, que fue la pionera en la región en cuanto al lleno de requisitos de calidad que exige el MEN para otorgar este reconocimiento. Luego, en el 2010, la acreditación fue lograda por la sede Manizales de la Universidad Nacional de Colombia. El 2015 fue otro gran año para la calidad universitaria de la capital caldense, al recibir esa acreditación las universidades de Manizales y la Autónoma. Con la Católica, que fue acreditada por cuatro años y medio, se completa así un selecto grupo de cinco instituciones de educación superior que tienen sede en esta ciudad.

Para que la UCM fuera acreditada debió pasar por un arduo proceso que le exigía que, al menos, el 25% de sus programas fueran de alta calidad. La búsqueda de ese objetivo comenzó con fuerza en el 2015, con una exigente autoevaluación que fue presentada, finalmente, en el 2018. Tras la visita de pares académicos el año pasado, para verificar todos los documentos presentados, se entregó un concepto favorable que hoy permite que Manizales se consolide como ciudad universitaria no solo por cobertura, sino también por calidad.

Viene ahora, sin embargo, lo más importante, que es mantener en alto los procesos, tomar las decisiones acertadas que aporten mayor solidez al proceso de avance de la calidad y así poder seguir recibiendo en próximos años las respectivas reacreditaciones. Las cinco universidades con sede en Manizales que hacen parte de esta élite tienen ese inmenso compromiso de seguir mejorando para ser cada vez más reconocidas como centro de pensamiento, de investigación y de influencia social y económica no solo en esta región sino para todo el país.

Debemos destacar que estas universidades, junto a otras que buscan también ingresar más adelante al selecto club, trabajan de la mano y con gran coordinación en el Sistema Universitario de Manizales (Suma) y en proyectos como el del Campus Universitario. Así mismo, las posibilidades de seguir creciendo en calidad se ampliaron desde octubre pasado, cuando Manizales fue aceptada por la Unesco en su red internacional de Ciudades del Aprendizaje, lo que facilita los intercambios con los principales centros de educación en el mundo.

No es casual lo que está ocurriendo con nuestras universidades. Desde hace varias décadas están empeñadas en trabajar para destacarse, lo cual viene confirmándose en diferentes escalafones en los que se posicionan por su crecimiento en investigación y producción de conocimiento. Recordemos que a mediados del año pasado en la escala del Sapiens Research, que mide el nuevo conocimiento que se produce, la ciudad está en el primer lugar entre las regiones que ingresan entre 4 y 7 universidades en ese ránking. Además, en la QS (Quacquarelli Symonds), que es un escalafón manejado por una firma británica que cubre América Latina, y que es de gran exigencia, la Universidad Nacional, la de Caldas, la Autónoma y la de Manizales ingresaron al selecto grupo de 53 de Colombia que lograron un sitio en la lista.