La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice con claridad que las pruebas de laboratorio para detectar la presencia del coronavirus Covid-19 son la manera más simple y efectiva de luchar contra el contagio. El ejemplo de Corea del Sur, que practicó pruebas masivas entre sus habitantes, demuestra que de esa manera se logra identificar con rapidez a las personas portadoras para aislarlas y tratarlas, y así contener la enfermedad y evitar muchas muertes. De hecho, de los 8.652 casos registrados hasta el jueves, se tenían 94 muertos, lo que ubica su índice de mortalidad en cerca del 1,1%.
El caso de Alemania, que también priorizó las pruebas, es incluso más sorprendente, con 15.320 contagios hasta el pasado jueves, y 44 muertos hasta la misma fecha, para un índice de mortalidad del 0,3%. Muy distinto es lo ocurrido en Italia, donde el mismo día se contabilizaban 41.035 infectados y 3.405 muertos, alrededor del 8,3% de mortalidad, la más alta del mundo. En este último país no se adoptó la estrategia de las pruebas masivas rápidas.
En Colombia, lastimosamente, tampoco ha sido posible avanzar en las pruebas, e inclusive las pocas que se toman cada día en el territorio colombiano tardan en llegar a los laboratorios, debido a demoras en las EPS y secretarías de Salud, según la Contraloría General de la República. Con la infraestructura habilitada por el Instituto Nacional de Salud (INS), que incluye al Distrital de Salud de Bogotá y al Departamental de Salud de Antioquia, se podrían practicar 2.200 pruebas diarias, pero solo se procesan 800 en promedio.
Además, las universidades de Los Andes, del Rosario y Nacional, Sanidad Militar, y laboratorios de varios departamentos se preparan para analizar pruebas, ante lo cual esperamos que mejore la dinámica de los resultados. Con la habilitación de estas nuevas opciones se podrían procesar 3 mil pruebas cada día; lo cual resulta todavía insuficiente si pensamos que en Corea se hacen, en promedio, 18 mil diarias.
Bajo este panorama, y teniendo en cuenta que el proceso de análisis no dura más de 18 horas, llama la atención que después de una semana de conocerse el primer caso de coronavirus en Manizales, del cual se sabe que fue importado por un turista inglés que ingresó por los Estados Unidos, no se tengan conclusiones de los exámenes a sus acompañantes y personas que compartieron con el ciudadano británico en varios lugares de la región. Eso, pese a que la Universidad de Caldas tiene listos dos laboratorios para realizar esos análisis, y está a la espera de la autorización de INS para hacerlo.
Así como nuestra universidad son varias en todo el país con posibilidades de ejecutar esa labor, pero extrañamente no se les autoriza para hacerlo, cuando esa podría ser la principal estrategia de contención. Es momento de avanzar en la descentralización de los análisis, en la agilidad en la toma de muestras y en la cantidad que se procese cada día.
No se ve tampoco voluntad del Gobierno Nacional para agilizar la importación de los materiales radiactivos usados para esta tarea, lo cual puede significar pérdida de tiempo valioso para luchar con éxito en contra de la expansión del coronavirus. Esta es la hora en la que debían estarse practicando pruebas en gran número a las personas que llegan por los aeropuertos, terminales terrestres y hasta en los peajes de las carreteras. De esa manera, como lo hizo Corea, se podrían detectar muchos casos, aislar rápidamente a los portadores del virus y empezar tratamientos médicos para curarlos. Esa sería la real labor de contención que evitaría el rápido crecimiento de casos y le pondría obstáculos a los fallecimientos.