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Hoy es un día esperado desde hace mucho tiempo en este diario. Completar el primer siglo de vida es una especie de objetivo que se fija como incierto y al que muy pocos llegan. Sentir que se alcanza esa meta se expresa como un renacer. Ese es el ánimo que en esta fecha acompaña a todos los que hacemos parte de esta empresa, quienes empezamos a mirar hacia el horizonte futuro con el convencimiento de que las bases presentes nos permitirán completar nuevas centurias.

Quienes crearon LA PATRIA el 20 de junio de 1921 eran personas visionarias, sin duda, pero en un momento en el que los periódicos de mayor tradición morían al poco tiempo de haber nacido, el objetivo de llegar a los 100 años, seguramente, no les pasó por la cabeza. Fueron hechos que sumados, en el trabajo del día a día, en el empeño de ser portadores de ideas que perduraran y en la lucha cotidiana con las adversidades, fueron cimentando esa historia de persistencia de la que hoy es protagonista esta casa editorial.

Si bien los orígenes de LA PATRIA, como la de todos los periódicos que surgieron durante el siglo pasado, tuvo en la defensa de causas políticas muy marcadas esos ímpetus que llevaron a su evolución, la apertura desde hace tiempo a otras ideas en sus páginas y el empeño por caracterizarse por la vocación de veracidad y profundidad de sus informaciones, así como por prestar un servicio real y directo a las comunidades, le han permitido a este diario contar con la fidelidad de sus lectores y anunciantes, a quienes agradecemos su respaldo permanente, así como también sus críticas y observaciones que nos han permitido ser mejores.

El rigor periodístico y la responsabilidad de brindar la mejor información a los caldenses, con análisis y diversos puntos de vista, han sido valores que se han mantenido por décadas y que aspiramos a seguir desarrollando a favor de la región y del país. Al revisar nuestra larga historia hemos corroborado que las transformaciones tecnológicas han ayudado a consolidar esos principios e inclusive a ponerlos más cerca de los ciudadanos, y de ahí nuestro empeño por estar siempre actualizados y tratando de implementar todas las tecnologías que nos permiten estar más cerca de nuestras audiencias.

Hoy, cuando no solo somos un diario impreso, sino que hacemos presencia en diversas plataformas de información en las que lo oportuno y lo veraz resulta fundamental, para derrotar las falsas noticias que cunden en el ciberespacio, refrendamos el compromiso de seguir aportando a la construcción de la historia sobre bases sólidas y confiables.

En el especial periodístico que ofrecemos hoy a nuestros lectores del impreso y audiencias digitales se condensan gran parte de esas experiencias variopintas, enriquecedoras, ejemplares que nos han brindado tantas personas e instituciones que han sido protagonistas de hechos claves para el desarrollo de la región. Sus testimonios, historias y expresiones de diverso tipo deben convertirse en inspiración para todos. En lo referente a esta empresa periodística, nuestro más sincero deseo es seguir contando con los caldenses de todas las generaciones, para mantener el periodismo de calidad que nos caracteriza, y entre todos edificar, por lo menos, otros 100 años de verdad.