La estrategia de Bancolombia de bajar la tasa de interés efectiva anual de sus tarjetas de crédito tuvo un efecto dominó. Otros bancos del país adoptaron seguidamente la medida y dieron la buena noticia a sus tarjetahabientes, que venían ahorcados pagando tasas muy cercanas a las de usura y más bien habían decidido dejar guardados sus plásticos por los altos costos que estaba representando su uso, justo en medio del alto costo de vida.

Preguntas

1. Frente a la bajada de las tasas de interés, motu proprio de los bancos, ¿estaban “voladas” las tasas de usura?
2. ¿Se necesita regular la tasa de usura o es mejor dejar actuar solo al mercado?
3. ¿Por qué no todos los bancos bajaron las tasas para todas las compras y todas las tarjetas?

A favor
Andrés Felipe Giraldo Palomino
director del Departamento de Economía de la Universidad Javeriana de Bogotá.
1 La tasa usura la define la Superintendencia Financiera, hay una regulación y leyes detrás. Son tasas máximas, por encima de las que ningún banco puede prestar. Lo que ha pasado es que casi siempre los bancos fijan tasas muy cerca de la tasa de usura, que depende de sus costos. Pero cuando se mira el margen de intermediación, que es la diferencia entre las tasas de colocación, o sea a las que los bancos prestan la plata, menos la tasa de captación, que es a la que captan ahorros y CDT, ya uno dice que puede ser demasiado alto. Si muchos bancos se están moviendo a bajar estas tasas específicas es porque pueden hacerlo, no les puede generar pérdidas. La pregunta es, ¿por qué no lo habían hecho antes?
2 Creo que es mejor dejar actuar al mercado. Poner una tasa límite casi que lleva estratégicamente a los bancos a pegarse a ella, en últimas cobrar lo máximo que puedan. ¿Sin la tasa límite será que los bancos fijarían algo por debajo? Sospecharía que sí, y si todos se van a un acuerdo es algo prohibido por la ley, porque ningún competidor en cualquier industria puede llegar a acuerdos de precios, es anticompetitivo y puede interpretarse como la formación de carteles en el sentido económico.
“Si muchos bancos se están moviendo a bajar estas tasas específicas es porque pueden hacerlo”.
3 No tendría la respuesta, pero, especulando, muy seguramente no tienen un segmento tan competitivo. Cuando uno habla de estos bancos se está refiriendo a más o menos 4 millones de tarjetahabientes, que es un número importante. Habría que mirar si ese número de tarjetahabientes es lo suficientemente alto para justificar que un banco X que no ha tomado la decisión la tome. Sospecho que en los siguientes días van a seguir moviéndose los otros bancos.
En contra
Carlos David Cardona Arenas
economista, docente del programa de Economía de la Universidad de Manizales.
“Estos bancos están buscando elevar un poco la demanda de crédito de los consumidores”.
1 El incremento en las tasas de interés del banco central repercutió en el mercado bancario terminando por elevar significativamente la tasa de usura, incremento que no es un buen indicador del mercado y por lo tanto de manera casi individualizada los bancos están buscando elevar un poco la demanda de crédito de los consumidores flexibilizando o reduciendo esa presión en la tasa de interés. Hay dos rubros específicos en que se ha visto la reducción en la demanda de crédito: la compra de vehículo nuevo y usado y de vivienda nueva, esta última que termina siendo de los rubros por los cuales la economía muestra signos de crecimiento. Queriendo tal vez evitar que la contracción en la demanda sea lo suficientemente significativa es que se reducen las tasas.
2 El objetivo es anclar las expectativas. ¿Qué significa que los bancos alivien sus tasas? Es más un mensaje de confianza que podría a su vez operar de manera conjunta con las operaciones del banco central y estabilizar el mercado para evitar especulación. Se prevé que al menos la demanda de crédito se mantenga, no crezca, que sería lo ideal, y de esa manera anclar las expectativas inflacionarias.
3 Eso depende mucho de sus resultados en balance. Quienes han bajado sus tasas tiene que ver con que han evidenciado reducción en la demanda de crédito, y quieren mitigar esto de cara a sus resultados financieros de los próximos meses. Los bancos que no lo han hecho es porque probablemente no han visto algún riesgo en cuanto a la demanda del crédito en el corto plazo.