La realidad son los hechos presentes que pueden medirse y donde yo puedo actuar: son los sucesos que están frente a mí.
La realidad no es ni buena ni mala, es neutra y externa. La realidad interna, si la miro desde el amor, tiene una dualidad: es una realidad de sufrimiento o es una realidad de satisfacción. Lo que está afuera no tiene dualidad.
Lo que tiene dualidad es lo que tengo adentro y la interpretación que hago de la realidad puede ser engañosa.
Por lo general lo es, a menos que la mire con sabiduría. Pero la realidad como tal, no es engañosa.
Es un resultado verificable, está presente; nada es bueno ni malo, es neutro. Mira que a veces lo “malo” te trae bienes.
La interpretación mental que hago de un hecho puede ser buena o mala; por eso es engañosa. Pero el hecho no es ni bueno ni malo, es real.
Bueno y malo son adjetivos que depende de las creencias que puedes conservar o cuestionar. Atrévete a cuestionar.
@gonzalogallog