Desde hace muchos años Santágueda se ha convertido en el paseadero por excelencia de los manizaleños e incluso de los municipios aledaños a esta vereda de Palestina. Igualmente, es aprovechada por personas que no son oriundas del centro sur del departamento de Caldas.
Santágueda es un sitio muy agradable con buen clima, buena topografía y rodeada de verdes montañas. Lamentablemente, con el paso de los años se han presentado grandes dificultades que han afectado el goce y disfrute tanto de los pobladores como de los visitantes, limitando su potencial turístico y su desarrollo económico. Estas dificultades son: el mal estado de su carretera de acceso desde Tres puertas, el desorden urbanístico  con su correspondiente incumplimiento al plan básico de ordenamiento territorial, las permanentes fiestas que se presentan en el sector con sus altos ruidos que van hasta altas horas del amanecer, la falta de mantenimiento y deterioro de los senderos peatonales, la invasión del espacio público y, el más delicado, la falta de alcantarillado.
Hace unos años Santágueda fue objeto de una intervención muy importante en su carretera principal que, en su momento, quedó muy buena; sin embargo, le faltó el mejoramiento de la vía que va desde Tres Puertas hasta La Portada. Esta carretera tiene un precario mantenimiento, es estrecha y peligrosa y es muy poco el cuidado que le pone la Gobernación de Caldas.
Cuando se construyó el anillo vial del sector principal de Santágueda, la intervención incluyó unos senderos peatonales que, desde el punto de vista del diseño, se veían muy agradables. Pero, como se dijo en su momento, requerirían un mantenimiento permanente que ni el municipio ni la gobernación estaban, ni están actualmente, en condiciones y capacidades de hacer. Hoy en día, estos senderos están deteriorados y enmalezados, por lo que no pueden ser aprovechados en la debida forma.
El programa de mejoramiento vial trajo consigo la reubicación de los vendedores ambulantes que estaban instalados sobre la vía principal, a quienes localizaron en un área que fue debidamente acondicionada para que pudieran ofrecer y vender sus productos sin generar incomodidades ni riesgos a la comunidad. Lamentablemente, esa recuperación del espacio público, con la anuencia del alcalde, se está perdiendo. El actual mandatario ha permitido y autorizado la construcción de nuevas casetas sobre los andenes en una clara violación del plan básico de ordenamiento y cohonestando con la violación del espacio público.
 Santágueda, por esencia, debe ser un espacio de paz y tranquilidad; sin embargo, esto no es así. La mayoría de las casas que son alquiladas para los fines de semana, e inclusive los mismos propietarios, las aprovechan para hacer fiestas ruidosas que duran el día y la noche entera y no permiten que tanto los pobladores como visitantes puedan disfrutar de la tranquilidad que están buscando y que supuestamente les debe brindar este sector.
Hace unos años se adoptó el plan básico de ordenamiento territorial, con el que, entre otras cosas, se procuraba evitar la densificación de construcción de viviendas y se buscaba que el sector mantuviera su clara vocación rural y turística. Sin embargo, los alcaldes que han gobernado el municipio de Palestina después de la aprobación del plan, no han hecho cumplir sus lineamientos, permitiendo la presencia de construcciones apeñuscadas que no cumplen con las normas de ordenamiento.
Una de las grandes necesidades del sector es el alcantarillado.  En la administración municipal y por voluntad de la alcaldesa del momento se invirtieron recursos aportados por la nación, la gobernación y Corpocaldas para su construcción. Lamentablemente la obra quedó interrumpida porque la presente administración no se interesó en terminar el proceso que consistía esencialmente en hacer las conexiones domiciliarias y poner a funcionar el sistema, lo que constituye no solo un claro y evidente detrimento patrimonial de los recursos del Estado, sino que además genera un problema de salubridad de alto riesgo para los pobladores y visitantes de este sector. Es importante tener en cuenta que el manejo de las aguas servidas de las casas, se realiza a través de pozos sépticos que, ante la densificación del sector, son una clara fuente de contaminación.
Es necesario y urgente que las autoridades competentes tomen medidas para solucionar las dificultades que enfrenta Santágueda y permitir su desarrollo turístico y económico de manera sostenible.  No hay ninguna duda de que la región es un lugar privilegiado por su clima, topografía y belleza natural, por lo que se requiere un trabajo conjunto de las autoridades, los pobladores y los visitantes, para lograr convertirlo en un destino turístico sostenible y atractivo para todos.
Ñapa:  Finalmente Petro logró lo que quería. Nombrar ministros que fueran de sus entrañas, que no lo cuestionen y quitarse de encima a  los jefes de los partidos políticos que no los quería como aliados, sino como subalternos.  Ahora va a gobernar solo y negociando directamente con los congresistas para conseguir las aprobaciones de sus proyectos.  Entre otras Lizcano quedó como el “moisés” del gobierno.