A las 11:50 am del miércoles 20 de enero se posesionóJoe Biden como el presidente número 46 de los Estados Unidos. La ceremonia es conducida por la senadora demócrata Amy Klobuchar, exultante de alegría, y por el senador republicano Roy Blunt, quien censura sin ambages el asalto al Capitolio. El reverendo Leo Jeremias O’Donavan, católico y de ascendencia irlandesa como Biden, da un mensaje espiritual. Lady Gaga, blanca y contestataria, canta el himno nacional. Andrea Hall, mujer negra y bombero, hace el juramento a la bandera, verbalmente y en lenguaje de señas. Kamala Harris, de ascendencia jamaiquina e india, se juramenta como vicepresidenta ante la juez Sonia Sotomayor, primera mujer latina en llegar a la Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos. La icónica cantante Jennifer López interpreta “This land is your land” – esta tierra es tu tierra, y en español canta: “Una nación bajo Dios, indivisible, con libertad y justicia para todos”. Y llega el momento central, el juez John Roberts, quien preside la Corte Suprema, toma el juramento como presidente a Joe Biden. Justo en este momento quedan desactivadas las claves del arsenal nuclear que podía activar el presidente Trump. El juramento es simple: proteger y defender la constitución.
El discurso de Biden es sencillo, pero cada palabra y afirmación está medida y ensayada milimétricamente. Ratifica su elección como un triunfo de la democracia, la cual es débil pero prevalece. Le dice a los norteamericanos que hay mucho por reparar, restaurar, sanar y finalmente ganar; que lo primero a resolver es el Covid y que hay que derrotar el supremacismo blanco y el extremismo. Así como Lincoln ligó su espíritu a la abolición de la esclavitud, él lo atará a la unificación del país. Al odio opondrá la unidad con la que se puede hacer todo. Unidad, la palabra más recurrente y repetida del discurso. Habla de un camino de oportunidades y de la necesidad de pensar que no hay enemigos, más bien vecinos. Cada desacuerdo no tiene que ser una causa para la guerra. Le recuerda a sus adversarios que aún si no están de acuerdo, eso es democracia, y que eso no puede llevar a la desunión, y él será el presidente de todos. Ante la evidencia de una crisis y del desafío enorme que afronta la nación, recuerda que hace menos de un siglo las mujeres reclamaban el voto en el mismo lugar donde se está llevando a cabo la ceremonia, y que hoy una mujer negra e hija de inmigrantes llega a la vicepresidencia. Afirma nuevamente que lo mejor de ‘América’ es que es una tierra de oportunidades y de verdad, que su país es una nación y hace una alusión a la Biblia.
Solo dos líneas para el resto del mundo: Estados Unidos reparará las alianzas y se manifestará con el poder del ejemplo, así recobrarán el liderazgo mundial. Acto seguido, el presidente invoca una plegaria silenciosa por las víctimas del covid, 400.000 en su país. Se compromete a combatir la violencia, la inequidad, la crisis climática y el covid, “seremos juzgados por cómo resolvamos esta crisis”. En un tono de voz tranquilo, como el de todo su discurso, promete nuevamente defender la constitución y traer justicia, decencia y dignidad. Termina con un “God bless América y may God protects our troops” – Que Dios bendiga a América y bendiga a nuestras tropas”.
El acto se remata con el cantante de música country Garth Brooks, blanco y republicano, interpretando Amazing Grace. Pasa entonces al escenario la poeta negra Amanda Gorman y luego el reverendo negro Silvester Beaman. Todo termina y Biden se retira.
Trump avisa que regresará y parece que abandonará el partido Republicano para crear el suyo. Ojalá sea así, sería su tumba política. Pero mejor si antes termina en la cárcel. La pareja expresidencial abandona la Casa Blanca sin dar las gracias a quienes les sirvieron: Melania no se toma el trabajo de dejar notas escritas de su puño y letra a sus colaboradores, como es costumbre, le deja la tarea a su asistente. Algo va de esta frívola mujer de farándula a la doctora Jill Biden, reconocida experta en educación.
Sin duda, al mundo le irá mejor con Biden. La tarea que tiene es descomunal, empezando por el covid y la crisis ambiental planetaria.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015