Mario César Otálvaro

@macotal

El colega Esteban Jaramillo, con quien compartí años en la Telepolémica, y compañero de página en este diario, propuso en su columna semanal "una estatua para Bodhert".

"Se la merece. Nadie aguanta dos años y medio de fracasos sin ser despedido, y sin el decoro de presentar la carta de salida" sostuvo el comunicador… ¡De acuerdo! La placa -agregado de este periodista- debe llevar la leyenda: "Oda al cinismo deportivo".

Increíble que un técnico eliminado de cuanto torneo disputó reciba continuidad, se trague el cuento de que lo quieren, y ni se entere del rechazo generalizado que provoca.

Tres ligas seguidas sin clasificar, humillación en la Suramericana, dos copas sin avanzar de ronda, entre otras, conforman su catálogo vergonzante con Once Caldas.

Lo último fue la liguilla de perdedores, en la que tampoco pudo, feriando la poca imagen que le quedaba, convirtiéndose en piedra angular de ataques personales en las redes sociales. Y dizque piensa seguir, sin darse cuenta de que lo están utilizando, pues es la carta de los dueños por su maleabilidad, acepta lo que le dan y nunca se impone.

Otro en su condición se va, le destruyeron el equipo que supuestamente construyó durante tres años, le desarmaron la defensa, y le van a entregar un plantel de tres pesos.

Su contrato expira el 31 de diciembre -no de 2021 como acomodadamente dice el presidente- y debe obrar la sensatez, el orgullo, la dignidad y el respeto por esta plaza y sus seguidores.

Igualmente falso que quienes están gestionando la compra del club acepten su permanencia, ya que están al margen de las decisiones y tienen una idea diferente.

El negocio -sin caerse no anda bien- ojalá enderece porque fastidia la orientación retadora, desafiante, autoritaria y prepotente de los actuales administradores.

Empeñados en que solo les importa lo suyo, cuando se pedía la continuidad de Ovelar, anunciaron su salida, y sin medir consecuencias despacharon a quienes finalizaban contrato, Gómez, Correa, Elvis, Payares, Rojas, y los arqueros Román y Truque.

Es decir, sacaron los titulares atrás, clara descalificación de lo hecho por su protegido, pues se supone que los grandes entrenadores se miden por el orden y acoplamiento defensivo.

Evidente mensaje de que no hay proyecto deportivo, y que prevalecen los afanes económicos.

Preocupan casos como el de Mosquera -difícil encontrar laterales izquierdos de su regularidad- y el del capitán Correa, porque desapareció el criterio deportivo.

A 19 días de comenzar la Liga el panorama es desolador, solo hay 13 profesionales, Ortiz, Pájaro, Palma, Julio, Clavijo, Mejía, Guzmán, Rodríguez, Hernández, Lemos, Carreazo, Ménder y Estacio, con 5 juveniles, Ferrín, Suárez, Castrillón, García y Cubides.

Total, todo apunta a un equipo Sub-20 en su mayoría -tipo Quindío o Envigado- con jugadores cuyo salario no supere los 10 millones de pesos.

P.D.: Loor al campeón América que en emotiva final logró su título 15. A Santa Fe la faltó nómina. Con mayor calidad técnica nuestro torneo sería excelente. Por ahora que celebre Juan Cruz Real, técnico sin pasado que hizo las cosas bien, y la multitudinaria afición escarlata.

Hasta la próxima...