Mario César Otálvaro
@macotal
Esto apenas comienza, pero pensé que Once Caldas mostraría más en el estreno porque el equipo lo armó el técnico, se jugaba en Palogrande, el rival era categoría B, y como se dice en el medio, duelo directo de seis unidades en la puntuación del descenso.
Lo mejor, el primer tiempo, por manejo, amplitud de terreno, desborde por bandas, y fútbol interior con Juan David Rodríguez, convertido en líder, y Robert Mejía como complemento, creando muchas opciones por ninguna de la visita, o sea, sin definición, igual que antes.
Marcelino Carreazo adelantó a los 49 minutos, y tres después, error del portero para la paridad que se sostuvo hasta el final, con confusión de libreto, y buscando soluciones con los mismos hombres que cerraron la campaña pasada.
Debutó Éder Chaux, respetable posición de Corredor al ponerlo por encima de Gerardo Ortiz, el titular en los últimos tiempos y arquero de selección paraguaya, y para colmo, regaló el empate en la primera presencia ofensiva del Unión.
También discutibles los cambios, Nelson Quiñones era el más activo de los delanteros, y menos entendí la salida de Robert Mejía, o la de un atacante - Diego Valdés - por un lateral –Nicolás Giraldo– necesitando la victoria.
Eso, a propósito, enseña corta la nómina de Once Caldas, pues revisando la planilla y las alternativas, y frente a la urgencia del resultado, nadie en el banco tendía una mano, estaban Guzmán, Córdoba, y los ingresados Giraldo y Danovi, de corte defensivo.
Quedan por verse Ayron del Valle, Alejandro Barbaro y Marlon Piedrahíta, lo que invita a procurar acciones colectivas de ataque debido a la ausencia del artillero clásico, intensificando trabajos de definición con quienes pisen el área.
Pese a todo, hubo pasajes interesantes contra un Magdalena que vino a defenderse, a cortar el ritmo, que solo marcó por un yerro del local, y que dejó una grata impresión en Joel Contreras, un ´pelao’ talentoso, veloz, hábil e influyente.
Tampoco las cifras ayudan para aceptar como positiva la presentación de Once Caldas, pues según Dimayor el dominio fue abrumador con 12 remates al arco y posesión del 63% por tres disparos en contra. ¿Cómo no se gana con semejantes datos?
Es cierto que esto apenas despega, lo que no disimula el sentimiento de frustración, pues si algo debe rescatar Once Caldas es el protagonismo en casa; fue el octavo partido oficial con Corredor, sumando 2 victorias, 3 empates y 2 derrotas.
Con relación a los debutantes, lástima lo que le pasó a Chaux, Torijano se vio impreciso, Banguero no sobresalió, Juan David, el mejor, se quedó físicamente, y Valdés, luchador sin aciertos. A última hora Piedrahita no pudo estar, y Brayan Córdoba fue suplente.
Y como no hay tiempo para respirar, se vienen Equidad –miércoles a las 2– y Rionegro el sábado, ambos por fuera, no solo para ir encontrando la forma competitiva óptima y la cuota de gol, sino para pegarse desde el principio a los de arriba en la tabla.
P.D.: En el acto de presentación de Once Caldas, modelo 2022, ante los abonados, el público rechifló la marca por la que pretendían cambiar el nombre. Entre tanto, excluyeron - por incumplimiento del Club - el patrocinio de la Industria Licorera, tan nuestra como el mismo equipo. Sin sentido de pertenencia.
Hasta la próxima...
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