Solo 13 minutos -cumplidos 6 partidos de Liga- Once Caldas ha estado arriba en el marcador sobre sus rivales. Contra Envigado -fecha 3- Estacio convirtió el gol del triunfo a los 77.

Nunca más se ha visto victorioso, por el contrario, ante Bucaramanga estuvo perdedor durante 29 minutos, y frente a Rionegro que anotó a los 4, la paridad llegó a los 24. Sin embargo está invicto pese a que suma 246 minutos sin celebrar gol, yéndose en blanco en 3 de los 6 encuentros disputados.

Estas citas estadísticas acompañan el previo del Pereira-Once Caldas de esta noche, fiesta deportiva que se volverá a vivir con intensidad después de 8 largos años.

Se extrañaba el clásico regional, incomparable, que sabe distinto, que no se puede perder, que mueve el motor del hincha y toca las fibras más sensibles de la pasión.

Presión pura para Bodhert, en líos por el bajo producido en la tabla y el enojo por la falta de ideas ofensivas, amén de ese dibujo táctico repetido que lo torna predecible y vulnerable.

Oportunidad especial para revertir confianza y seguridad; lo demás será aumentar tristemente las dudas, restando crédito a sus acciones como entrenador del equipo. Una derrota no implicará eliminación porque quedarán 13 jornadas, pero si un golpe letal en asuntos de orgullo, aspiraciones, y respeto por la institución.

Los matecañas llegan 2 puntos por encima, con un ambiente interno saludable, y con la tranquilidad de éxitos consecutivos sobre sus opositores directos, Chicó y Jaguares.

Los objetivos también son disímiles, mientras que ellos lucharán a lo largo de la temporada por salvar la categoría, Once Caldas por meterse en el lote de los 4 primeros.

En estructura da la sensación de que Pereira -que nominalmente es inferior- ofreciera alternativas múltiples. Cravioto, aparte de que los subió, hizo campaña con el Huila.

En experiencia, recorrido, títulos, pasado, la historia del mismo modo es desigual, y esa supremacía es la que el hincha quiere que se mantenga. De allí que las urgencias sean mayores para el blanco, obligado a abandonar ese marasmo en el que entró al encasillarse en fórmulas poco prácticas.

En contiendas por la sobrevivencia, Once Caldas ha sacado resultados, distinto a que no gana duelos que suponen logros, extensa lista de la que solo menciono a Santaní por suramericana, Nacional por copa Aguila, o Rionegro por cuartos de liga 2018.

Muchos preguntan por el Bodhert del semestre cuando llegó a Manizales, acertado en la charla del entretiempo, de buena lectura, y que renovaba con las variantes. Al parecer, desapareció dando paso a un orientador iterativo, moldeado en una sola figura, y cómplice de jugadores con discreto nivel, sostenidos a la fuerza.

Sin pelota quieta, ni ensanchamiento de campo, ni laterales que profundicen -la orden es meter diagonales hacia adentro- y con la fijación -desde que llegó Ovelar- de tirar centros aéreos.

Clásico apto -ganándolo- para renovar votos; perderlo complicará el andar en una liga que se aprieta con agenda dura, nada menos que con América, Millonarios y Nacional al frente.

P.D.: Desde este lunes 2 de marzo, LA PATRIA RADIO 1540 AM -Radio Cóndor- tendrá una interesante y novedosa parrilla de programación. Aceptamos la invitación del director Nicolás Restrepo, y estaremos con SIEMPRE FUTBOL LA PATRIA todos los días de 9:30 a 10:30 de la mañana. Los esperamos en sintonía.

Hasta la próxima…