Los hechos sobre la dinámica de los mercados de trabajo en el mundo son contundentes: el desempleo crece y crece. Y no será fácil modificar la tendencia. En Colombia la expectativa por las reformas laborales que buscan flexibilizar algunas normas, como la contratación por horas, deja al descubierto muchas tensiones. El sistema económico y social no está pudiendo responder adecuadamente para asegurarle a las nuevas generaciones su vida laboral.
En un reciente documento de las Naciones Unidas sobre el cierre de las brechas de inequidad en el mundo para alcanzar la justicia social, se presentan hechos tozudos:
El empleo ha crecido desde 2008 a una tasa del 0,1% anual, mientras que entre el 2000 y 2007 lo hacía al 0,9%. Es decir, el empleo crece, pero muy lentamente y cada vez menos.
En segundo lugar, el 60% de los trabajadores carece de un contrato laboral. Muchas veces la política económica y laboral se fija en cómo proteger a los trabajadores, y no mira con detenimiento a los que no están trabajando, los excluidos del sistema. Una mirada más integral puede aportar seguramente mejores luces para la política pública.
Menos del 45% de las personas empleadas tienen trabajo de tiempo completo. Es decir, hay mucha informalidad y fragmentos de jornadas en que se encuentra ocupados. Para muchos es la precarización de las ofertas laborales.
En el 2019 había 212 millones de personas sin trabajo, en el 2018 eran 201, es decir, en un año 11 millones de personas sumaron a las personas de brazos cruzados, porque el sistema no les brinda oportunidades. Son muchas personas, que tienen un gran potencial de creación y generación de riqueza.
Finalmente, 600 millones de nuevos trabajos se necesitan crear de aquí al 2030 para absorber las personas que ingresarán al mercado laboral en el futuro. Lo que significa que, si no se logra una dinámica diferente, la situación sencillamente va a empeorar.
Un nuevo acuerdo social sobre el trabajo es necesario. El trabajo es uno de los elementos constitutivos de hombre en el mundo, tener tantas personas marginadas del mercado laboral, y tener otro tanto en situación indignas o condiciones limitadas, es muy grave, pues sencillamente es una exclusión de importantes grupos de la población. La solución no será fácil, ni sencilla, la complejidad social y económica es muy grande, pero hay que enfrentarla.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015