Zapping 2.0

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“Solo puedo ser cuando reconozco en el otro lo que él es”

De las cosas más difíciles que hay en la vida es respetar la individualidad, reconocer en el otro que piensa, actúa y cree diferente. A veces nos sentimos con el derecho de imponer nuestras ideas sobre las de los demás sin darnos cuenta que precisamente es en ese momento que perdemos valor como seres humanos. Imponemos pensamientos desde muchos ámbitos, como políticos, religiosos, ideológicos y hasta culturales. ¿Por qué es tan difícil identificar "al otro" como una necesidad vital para poder compartir nuestra existencia? Estamos enseñados a que hay unas normas, una regularización de la forma en que vivimos y eso nos aleja de la comprensión y el amor por el prójimo, incluso nos aleja de nuestra propia convicción porque no dejamos que otros planteamientos y formas de pensar sean reconocidas y aceptadas. Probablemente entre más viejos somos, más oposisión hacemos ante la novedad que representan formas de actuar diferentes a las nuestras y eso muchas veces lleva al conflicto con las nuevas generaciones. No hacen las cosas como nosotros, solemos repetir, pero es que el mundo es diferente y nos toca (sí o sí) replantear nuestra mente ante lo que tenemos en el presente y proyectamos a futuro. No es solo la ideología de sexo, es todo lo que hace que seamos diferentes: color, religión, espiritualidad, cultura, intereses, capacidades físicas y cognitivas. El mundo es cada vez más pequeño y por eso debemos mirarnos más a los ojos y aceptarnos con el cariño que nos debe unir como terrícolas (Oh sorpresa, yo lo soy).
Entonces llega la Corporación Buen Vivir y con el apoyo de diversas instituciones y personas creando la segunda edición de lo que antes se llamó Semana de la diversidad y la inclusión y que ahora se presenta como Manizales en modo inclusión del 28 de octubre al primero de noviembre, lo mismo con un nombre menos escandaloso porque lo de la diversidad sigue generando sentimientos encontrados. Varias actividades que se realizan desde el pasado lunes y que propenden precisamente por el entendimiento de la diferencia y el reconocimiento de que todos estamos incluidos en esta dura tarea llamada existencia. Con actividades como La pasarela de la inclusión y la diversidad se pretende visibilizar la diferencia que nos marca y nos compete. También otra actividad realizada el lunes, que este servidor moderó, hablamos acerca de la inclusión en el mundo del cine proyectando el corto de De blanco a negro, hermosa historia de tres fotógrafos ciegos locales y otros tres cortometrajes con protagonistas transgénero que nos acercaron a su realidad. Con la presencia de algunos de los participantes del Inclusive short films que presentarán los cortos en una gala a realizarse en noviembre lo que se quiere es precisamente plantar una semilla en el corazón de los manizaleños para que esta sea una ciudad incluyente de verdad. Informaré próximamente sobre lo logrado, lo hecho y lo vivido.