La medicina es una ciencia, de ello no hay duda. La medicina, a pesar de los contradictores, también es un arte. Por lo tanto los médicos son científicos y artistas. Algunos tendrán más ciencia y arte. En otros, no será tanta la ciencia y el arte. Pero todos son dignos de un respeto por su calidad de seres humanos y por la vocación que exhiben la inmensa mayoría desde antes del inicio de sus estudios, para cumplir con lo que han prometido al tenor de los postulados de Hipócrates.
El médico no quiere subirse a un pedestal, la sociedad lo ha puesto allí y lo baja de él en la medida que sus acciones no se entiendan como de servicio, sin más límites que la vida del profesional.
El médico tiene la obligación de sacrificarlo todo por el compromiso con su paciente. El médico en la actualidad puede optar por ejercer, en un momento dado, su profesión ante una necesidad que le exige presencia y actuación. Pero el médico ha jurado ante la sociedad que jamás abandonará un paciente, puesto bajo su tutela ya sea por las normas imperantes o como un caso fortuito ante la adversidad de un ser humano o por solicitud autónoma de una persona que desea ser atendida por el médico.
Ejercer medicina no es fácil, y ejercerla bien es mucho menos sencillo. El ser humano es lo más complejo que existe en la naturaleza, no hay nada ni nadie que se le iguale, a pesar de las modernas tendencias que tratan de subestimarlo por la aplicación de teorías y sentimientos a veces antihumanos y eso que ellos pueden ser compartidos, pero en toda su extensión son exclusivos de los seres humanos.
Hay médicos que fungen como médicos, pero fingen en diferentes comportamientos que los alejan de la verdadera misión de la persona que debe estar dedicada al mejor y más sublime de los servicios, el bien de un congénere, entendido como el semejante.
Los médicos están construidos de fibras diferentes, unas naturales y otras adquiridas. Están sometidos al escrutinio profundo de su labor y en ello no hay nada que pueda considerarse como salido de los derechos que tienen los demás sobre los integrantes de una sociedad.
Pero el análisis de la labor del médico debe ser consciente en cuanto que su evaluación no puede ser fruto de pasajeros sentimientos, a los que tienen derecho todos, sino el resultado de un serio estudio de lo que ha pasado. El médico se equivoca por acción u omisión, además explícitamente por impericia, por negligencia o por imprudencia, durante el acto médico, pero tiene derecho a la defensa de aquello que se le imputa.
Médicos de excelente sapiencia y trayectoria no están exentos de quebrantar aparentemente las leyes naturales y humanas, pero no por eso, salvo que la justicia lo sancione, merecen el desplazamiento profesional.
El médico también tiene familia y ella no puede ser víctima indirecta e injusta de quejas atrevidas, sin fundamento, cuando su familiar ha sido demandado por presuntas faltas. El médico está obligado a resarcir los daños realizados, cuando él por su propia decisión lo reconoce o cuando el juez lo castiga en nombre de la sociedad.
Las sentencias de los tribunales de Ética no dan lugar a reparaciones monetarias. Si el demandante aspira a ello, debe recurrir a otras instancias legales. Tampoco los tribunales sancionan a instituciones o sirven de intermediarios para que los pacientes o sus familias obtengan servicios, por muy justificadas que aparentemente estén sus demandas.
La medicina es una profesión que merece consideración sin ir más allá de la Constitución, en los aspectos legales. En la égida de lo personal, el médico aspira a un trato justo, desprovisto de tendencias maledicentes. El médico es recipiendario excelso del bien de los demás.
Nota 1: No es justo el manejo que se le estádando a los insumos hospitalarios con motivo del coronavirus: escasos y costos elevados.
Nota 2: Manizales, desde hace más de cien años con vocación universitaria.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015