En cuanto a las exportaciones, Caldas tiene experiencia. Siendo considerado como el jalonador del Eje Cafetero en esta materia, se consolida como el departamento líder en exportaciones pasando de $847.877 millones en 2019 a $947.525 millones en 2020. Asimismo, la participación de las exportaciones en el PIB departamental viene aumentando de manera considerable. En el 2018 dicha participación fue de 15,3%, en el 2019 fue de 15,6%, mientras que en el 2020 fue del 20,7%.
Sin embargo, para nadie es un secreto que la ubicación del departamento no hace fácil su competitividad logística, pues al situarse en el filo de la cordillera central, la competitividad aquí es todo un reto. Se preguntarán entonces, ¿cómo lo hacen? Y para esta pregunta existe una única respuesta: todo es gracias a la pujanza de los empresarios caldenses.
En la actualidad, Caldas se ubica como el noveno departamento más exportador del país, con un incremento del 5% en 2020 con respecto a las exportaciones del año inmediatamente anterior. Las exportaciones de Colombia en 2019 se redujeron en US$ 1.500 millones aproximadamente, mientras Caldas por su parte, fue uno de los pocos departamentos con variaciones positivas durante ese mismo año.
Si bien es cierto que las exportaciones incrementan año tras año, aún con dificultades logísticas, se vuelve pertinente que los proyectos que responden a la visión de competitividad y productividad del departamento se ejecuten. La importancia que simboliza la logística dentro del intercambio comercial es crucial, ya que representa entre el 10% y el 15% del precio final de un producto elaborado. En el caso del sector empresarial de Caldas, factores como el unimodalismo del transporte pesan representativamente en los costos operativos y de comercialización. Desde hace ya unos 20 años existen, entre varios proyectos de región, dos plataformas logísticas multimodales de las que se viene hablando. Proyectos que aún no ven la luz al final del túnel.
Con la coyuntura actual, se vuelve trascendental buscar alternativas efectivas para impulsar el tejido empresarial existente. En este sentido, la competencia logística se convierte en una de las soluciones más destacadas. ¿Será entonces que nuestros líderes de turno se comprometen con la competitividad? Una pregunta para el debate.