Recorrer actualmente La 14 es encontrarse frente a unos desoladores espacios carentes de un número importante de productos básicos de la canasta familiar y de tecnología. Su etapa de crisis o de insolvencia le ha llegado, pero por fortuna, la Superintendencia de Sociedades ha considerado que dicha empresa es viable económica y socialmente. En efecto, hace más de un año, por Auto 2020-01-012270, dicha Superintendencia admitió la iniciación de un proceso de reorganización para la preservación de dicha empresa como fuente generadora de empleo.
Históricamente se cuenta que en los años 50, don Abel Cardona Franco, estando en Aguadas, Caldas, su tierra natal, tuvo la idea de dar apertura a la “La Gran Cacharrería” que terminó expandiéndose en la ciudad de Cali de la mano de sus hijos, especialmente de don Jaime Cardona Parra. Don Jaime, insigne comerciante y aguadeño como su padre, formalizó el inicio de la “Cacharrería La 14” en el año 1964, en la calle 14 con carrera 8ª, de allí su nombre.
Es innegable que el declive de La 14, coincide con la muerte de Don Jaime ocurrida en noviembre de 2015, a quien se le reconocía su talante humanista y carismático para con todas las personas, especialmente sus empleados a quienes incluso llamaba de memoria por su nombre. Como aspecto socialmente relevante, es el único supermercado donde los empacadores estaban en la nómina, cargo muy apetecido, pues además del salario recibían las acostumbradas propinas.
Los medios de comunicación y gremios vallecaucanos tienen a La 14 como una empresa emblemática en su territorio, que con sus más de 30 almacenes ha generado unos 15.000 empleos, siendo La 14 Manizales, el almacén que marcó el límite territorial hasta donde llegó su expansión en reconocimiento a sus afectos por esta tierra que los vio nacer. De manera paralela a la apertura del almacén de Manizales, La 14 de Pereira fue el gran centro comercial al cual se solía asistir en plan de paseo los fines de semana, caracterizado por una gran valla que se veía desde la gobernación del Risaralda y que aun permanece como símbolo del liderazgo de los Cardona.
La multinacional norteamericana Walmart pretendió en su momento la adquisición de estas tiendas, interés que no logró cerrarse por razones de interés nacional y familiar. La 14 Manizales conserva un formato de servicio al cliente envidiable y escaso en los demás supermercados de la ciudad, con amplios pasillos, accesos directos a parqueaderos exclusivos, plataformas de taxis y paraderos de transporte colectivos sobre las carreras 20 y 21.
No puede negarse que existen los formatos hard discount tipo Ara y D1 que aunque ofrecen buenos precios permanentes, sacrifican servicios y variedad. La diversidad de formatos debe existir y conservarse como una manera de garantizar el acceso en términos de libre competencia de los consumidores, especialmente en el centro de la ciudad. Es necesario contribuir al acompañamiento y la solidaridad con este tipo de empresas emblemáticas para la ciudad, la región y el país 100% colombianas. Muy especialmente Fenalco y en lo local el distinguido Juan José Silva su director, sabrán atender y ofrecer alternativas a los inevitables momentos críticos que acompañan a nuestras empresas.
Como cliente y consumidor, aún conservo el reproductor de audio Technics que adquirí hace un tiempo importante, pues como dice su eslogan “La 14 te da mas” y efectivamente, además de bienes y servicios me dio el amor que me acompaña, que es quien me cuenta cositas que no sabía. Deseo que pronto vuelvan a retomar el camino de la prosperidad y efectivamente nos vuelvan a dar más.