En buena hora la editorial Penguin Random House trae una nueva colección de Premios Nobel de Literatura, además en edición de bolsillo, que la hace más asequible para quienes aún no nos ponemos al día en la obra de estas genios de las que escribo hoy.
Oportuno resulta leer La buena terrorista, de la inglesa Doris Lessing (fallecida en el 2013), que se refiere a una época compleja del Reino Unido, tiempos en los que gobernaba la Dama de Hierro, Margaret Thatcher. Alice fue criada en una familia burguesa, pero decidió apartarse de las comodidades y aprendió a vivir por los otros, en comunas, en casas abandonadas que ocupa y recupera, a pesar del lastre de sus compañías. Tiene una mirada leninista del mundo, como integrante de un partido comunista que apenas es incipiente, porque rechaza a las otras líneas de izquierda.
Esos jóvenes andaban andaban furiosos con el Estado, y no deja uno de hacer analogía con las protestas que recorren hoy países latinoamericanos. Los inconformes de este libro buscan incluso aliarse al IRA y pretenden destruir las instituciones a las que culpan de todos los males. Se regalan para salir a marchar y armar desmanes. Pasar una noche en un calabozo poco les preocupa.
Entre muchos que protestan con razón, se encuentran otros que son manipulables, unos más que tienen que asumir las responsabilidades de los que las evaden, algunos que se meten en berenjenales que no tienen la capacidad para asumirlos y terminan en acciones delincuenciales. Por supuesto, no falta una fuerza pública que desconfía de esas personas y espera la menor provocación para desmedirse en infligir dolor.
Alice intenta ser una furiosa activista, pero alguien se tiene que encargar de las tareas y de pronto se va viendo parecida a su madre, de la que reniega. Con otros ideales, pero igual cuida a los demás, responde por ellos, habla con la fuerza para ofender cuando corresponde. Llegado el final termina siendo lo que tanto odia o peor, destruye lo poco que quedaba del anhelado mundo feliz, si alguna vez lo hubo.
En frases
* La culpa era del capitalismo, tan duro y doloroso, y tan indiferente ante el sufrimiento de sus víctimas.
* Entraron sonrientes y resplandecientes, con esa particular expresión del manifestante satisfecho.
* Se había reforzado su convicción de que el tipo de vida que llevaba era el único posible (de momento para ella, más adelante para todo el mundo).
* Era el poder. No fantasías sobre el poder, jueguecitos con el poder, envidia del poder, sino el poder mismo.
La nobel canadiense Alice Munro es considerada entre las mejores cuentistas modernas y este libro, El amor de una mujer generosa, es prueba de ello. Si existe una mirada femenina del mundo, ella sabe relatarla: historias de mujeres del común que muestran sus contradicciones, habla de personas como nosotros.
El primer relato, que da nombre al libro, es de alta factura, puede ser leído también como una novela corta, pues la manera en que esta autora se mete en la psiquis de su personaje principal, Enid, nos va guiando poco a poco hacia un final que parece sorprendernos, pero no hay razón para ello, porque al llegar a ese punto devuelves el hilo y te das cuenta que había dado las pistas para ello.
Los demás relatos no desmerecen, los hay más complejos y más cortos, pero en todos hay un excesivo cuidado por las formas narrativas, para demostrarnos que hay literatura de consumo masivo y hay quienes se preocupan por hacer de la construcción de las oraciones, de los párrafos, de los textos completos, un profundo placer. Eso es lo que hace Munro.
Es una buena opción para adentrarse en la literatura de esta autora, de la que seguimos descubriendo "su maestría en el arte del relato", como se lo reconoció el Premio Nobel cuando le fue otorgado en el 2013.
En frases
* La verdad es que uno no se da cuenta de hasta qué punto ha perdido la autoestima y de cuánto la echa de menos hasta que la recupera.
* Una cuestión de nervios (…). Esa es la manera en que se refiere a los ataques de pánico, a la ansiedad aguda, a la ansiedad y al derrumbe emocional.
* Lo sabrían. Siempre hay alguien que se encarga de que la gente se entere.
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015