“Locura es esperar resultados diferentes, haciendo lo mismo.” Albert Einstein. 
Inhalar su delicioso aroma invadiendo el hogar por las mañanas, sentarse alrededor de una mesa para compartir con los amigos viendo cómo humea desde las tazas, saborearlo escuchando la lluvia sobre el techo o iniciar cada día disfrutando su sabor desde las bellas montañas de nuestro departamento, el café forma parte de la cotidianidad de los caldenses, pero pocos saben que los primero de octubre se celebra el Día Internacional de esta bebida.
En nuestras montañas sí podemos tener esperanza y generar bienestar produciendo café. Es un producto con inmensas ventajas; se puede almacenar, vender a futuro, todo lo que se produzca lo compran y se pueden hacer proyectos turísticos vivenciales en las plantaciones.
Llegó la hora que entre todos busquemos planes de acción que resuelvan el problema de fondo de los cafeteros y que más de las 500 mil familias que viven del producto puedan hacerlo dignamente y cumplir sus metas personales o profesionales. La crisis del café no se puede convertir en escenarios de politiquería para presionar al gobierno de turno a resolver un problema de oferta y demanda en el mundo, por eso quiero dejar plasmadas las siguientes ideas con su plan de acción:
1) Las tierras que tienen café por encima de los 1.500 msnm tienen vocación para producir cafés especiales con tazas de excelentes calificaciones que nos permitirán vender la arroba por encima de los 100.000 pesos.
2) En Caldas tenemos tierras por debajo de los 1.500 msnm que tienen una producción de más de 300 arrobas con resultados económicos interesantes. Aquí debemos seguir innovando en procesos, tecnificación y prácticas agrícolas que permitan aumentar la rentabilidad.
3) Las tierras en donde no logramos tener altas producciones o buenas tazas, las debemos reconvertir. Aquí necesitamos trabajar el privado, lo público y la academia para desarrollar productos agrícolas sostenibles y rentables. Algunos cultivos para analizar dependiendo de cada tierra son: cacao, aguacates verdes y plátano tecnificado para agroindustria.
4) A manera de reflexión. ¿Dónde está el dinero del fondo de estabilización de precios que maneja la Federación para afrontar este tipo de crisis? ¿Qué se hace con los 6 centavos de dólar con los que se queda la Federación por libra exportada? ¿La estructura y los gastos que tiene la Federación son las idóneas para la nueva realidad de la caficultura colombiana?
5) Unir la producción del café con experiencias únicas y relevantes para atraer turistas extranjeros. 
Con positivismo, innovación, recursividad y sobre todo trabajando en equipo logramos superar la crisis del café. Caldas lo tiene todo.