Volvió la historia a los planteles
Señor director:
Como un logro maravilloso de las academias colombianas de historia del país, del cual fue pieza importante la actividad de la ilustre Academia Caldense de Historia, el parlamento colombiano dictó la ley 1874 del 27 de diciembre de 2017, que ordena a todos los establecimientos educativos del país la enseñanza de la Historia de Colombia. Dicha ley en su artículo primero establece: “Objeto. La presente ley tiene por objeto restablecer la enseñanza obligatoria de la Historia de Colombia como una disciplina integrada en los lineamientos curriculares de las ciencias sociales en la educación básica y media, con los siguientes objetivos:
A) Contribuir a la formación de una identidad nacional que reconozca la diversidad étnica, cultural de la Nación colombiana.
B) Desarrollar el pensamiento crítico a través de la comprensión de los procesos históricos y sociales de nuestro país, en el contexto americano y mundial;
C) Promover la información de una memoria histórica que contribuya a la reconciliación y la paz de nuestro país.
Al leer todo el texto de esta se norma, nos permite colegir que el Estado le ha entregado importantes recursos metodológicos a los maestros y fija lineamientos temáticos que los educadores de Colombia deben seguir, para que nuestros estudiantes conozcan el glorioso pasado de nuestra amada patria.
Los educadores necesitan el acompañamiento frecuente del m inisterio y de las secretarías regionales de educación, para que los objetivos propuestos por la ley se desarrollen en adecuada forma.
Las clases de historia deben ser una agradable tertulia histórica, nada de clases magistrales, ni obligar al personal a aprender como loros páginas de memoria, se deben dramatizar algunos acontecimientos de nuestras gestas libertadoras, en los casos que sea posible. A los niños y jóvenes se les debe mostrar el valor de nuestros héroes y heroínas, entre ellos a niños y niñas, como los heroicos actos de Pedro Pascasio Martínez, de doce años de edad, quien se negó a recibirle una mochila con monedas de oro al coronel José María Barreiro, para que lo dejara escapar de su escondite en la batalla de Boyacá y Matilde Anbaray, quien a los trece años entregó su ropa al ejército libertador. A los considerados héroes de Colombia, no se les puede presentar como seres imposibles de imitar. Diariamente vemos a hombres y mujeres que hacen parte de nuestras gloriosas fuerzas armadas, entregando sus vidas, en plena juventud, por defender la paz de nuestra amada nación, esos son héroes. En la pedagogía antigua, que no por vieja pierde actualidad, los pedagogos dijeron: “Necesitamos más hombres en la historia y menos dioses en el Olimpo”.
Siempre han sobresalido nuestros hombres por su valor y entrega, tanto en el interior del país como fuera de él, es de recordar el heroico desempeño de nuestros compatriotas en las guerras de Corea y el Perú.
Debiéramos volver a la celebración de las fiestas patrias, en las cuales se involucre a los estudiantes y sociedad en general. Regresar al respeto a las insignias patrias. No entiendo por qué a un gobierno le dio por obligar a las emisoras y a la televisión a transmitir a las seis de la mañana y de la tarde el Himno Nacional. Esta medida ha permitido que se haya perdido el respeto por nuestra insignia, antes de poner en vigencia esta norma, el Himno se escuchaba con sumo respeto, siempre de pie, despojándose del sombrero, en silencio, aunque se estuviera en un café o en un lugar de diversión. Hoy en las calles, cafés, vehículos, etc. se escucha sentado, conversando y a veces ni se percatan que lo que está sonando es uno de nuestros más importantes emblemas nacionales.
Ojalá estas reflexiones caigan en tierra fértil y renazcan resultados que les permitan a los colombianos conocer de donde venimos y a donde pretendemos llegar, amando más a nuestra patria y siempre rechazando a los quieren hacerle daño.
La Patria por encima de los partidos, nos dejó como legado el general Benjamín Herrera, pero muchos políticos en la actualidad han invertido esta frase, poniendo las ambiciones personales, por encima de los intereses de la patria.
Fabio Ramírez Ramírez
El uso de este sitio web implica la aceptación de los Términos y Condiciones y Políticas de privacidad de LA PATRIA S.A.
Todos los Derechos Reservados D.R.A. Prohibida su reproducción total o parcial, así como su traducción a cualquier idioma sin la autorización escrita de su titular. Reproduction in whole or in part, or translation without written permission is prohibited. All rights reserved 2015