Duvan Emilio Ramírez*
NEGOCIOS | LA PATRIA
De acuerdo con los planteamientos de la Corporación Andina de Fomento (CAF), las economías de América Latina y China crecerán en los próximos años entre dos y tres veces más rápido que las economías industrializadas, por lo que se constituyen en los polos de crecimiento mundial del momento; de acuerdo con esto se puede afirmar que la actual coyuntura internacional exige repensar las estrategias globales y regionales de alianzas, concediendo mayor importancia a los vínculos comerciales y de Inversión Extrajera Directa (IED) de los países latinoamericanos con China.
La importancia del mercado chino para América Latina se ha hecho evidente al observar que es el primer destino para las exportaciones de Chile y Brasil, el segundo para Perú, Cuba y Costa Rica; de la misma forma es el tercer país de origen de las importaciones de América Latina y el Caribe.
Una de las conclusiones del informe de la CAF, señala que con China como núcleo, Asia y el Pacífico se han convertido en la “fábrica mundial” de equipos de transporte y maquinarias; por tanto, América Latina y el Caribe deberían integrarse a estas redes de cadenas de suministro. Existe una ampliación y profundización de las redes de cadenas de suministro de Asia y el Pacífico en una amplia gama de sectores industriales que incluyen no solo productos manufacturados como maquinaria, aparatos y artefactos eléctricos, máquinas de oficina y máquinas de procesamiento automático de datos, vehículos de carretera y maquinaria de precisión. Por ejemplo, casi el 70% de las exportaciones de partes y piezas se dirigen a la misma región de Asia y el Pacífico.
En este sentido, resulta interesante para Caldas identificar mecanismos que permitan una mayor integración con la economía China, toda vez que en el ámbito regional se tiene una importante tradición en la fabricación de partes para el sector automotriz y herramientas. En general la industria metalmecánica ha sido una de las más dinámicas industrias caldenses, lo que permite observar la existencia y la posibilidad de generar economías de la aglomeración, las cuales se constituyen en la base de una mayor competitividad de este sector, facilitando la incorporación de la economía caldense en las redes de cadenas de suministros más dinámica y con mayor proyección de la actualidad.
De otra parte, es indispensable reconocer que el intercambio caldense con la economía China es muy bajo y no se han aprovechado las posibilidades de intercambio en otros sectores que la economía departamental podría beneficiarse de acuerdo con sus vocaciones productivas, entre ellos se pueden destacar la agricultura, la energía o en sectores con potencial aún sin desarrollar como la minería y la infraestructura.
También es necesario destacar el interés de China en la región latinoamericana, el cual se ha visto plasmado en un documento oficial que reconoce las potencialidades de la región para avanzar en una cooperación integral que incluya relaciones políticas y económicas, así como las cuestiones culturales, sociales y de seguridad. Específicamente en el ámbito económico, se definen una serie de áreas en las que se puede progresar conjuntamente, como el comercio, las inversiones, las finanzas, la agricultura, la industria, la infraestructura, los recursos naturales, la energía y el turismo, entre otras.
Otra oportunidad para aprovechar es que China también necesita afianzar su proximidad con América Latina, debido a que por su elevada tasa de crecimiento y al proceso de reconversión industrial de antiguas áreas rurales, aumentan los requerimientos de infraestructura, materia prima y energía, los que, junto al notable incremento de la demanda de alimentos, representan un poderoso motivo para fortalecer las relaciones con los países latinoamericanos exportadores de recursos naturales como es el caso de Colombia y específicamente del departamento de Caldas.
Como conclusión vale señalar que a China hay que dejar de verlo como el competidor que con mercancías baratas invade el mercado propio y destruye empleos, para tenerlo como un socio comercial importante que además demanda una gran cantidad de productos de diversa naturaleza, además de ser la puerta de entrada a la dinámica economía asiática lo que puede contribuir al crecimiento de la economía local.
* Decano de la Facultad de Ciencias Contables, Económicas y Administrativas de la Universidad de Manizales.
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