Último contenedor de armas de las Farc ya salió de las zonas veredales

Otro momento fundamental del proceso de paz que llevó a las Farc a desmovilizarse se cumplió este martes en Pondores, Fonseca (La Guajira) donde la ONU extrajo el último de los contenedores en el que se depositaron las armas y municiones que por años usó ese grupo en las regiones.

Al hacer el balance de cómo fue sacar de estas 26 zonas transitorias de normalización el armamento, el Jefe de la Misión de la ONU, Jean Arnault, sostuvo: “esto realmente encarrila el país hacia una nueva etapa (…) así se concluye el proceso de extracción de la totalidad del armamento y chatarra de munición existente en los 26 campamentos de las Farc, donde se recogieron 8.112 armas”.

La operación de extracción también se cumplió este martes de forma paralela en las zonas de La Reforma, Yari, La Guajira y La Variante. “El material transportado en los contenedores consta de 8.112 armas y casi 1’300,000 cartuchos incinerados”, sostuvo.

La ONU tuvo que realizar 16 movimientos aeroterrestres, y 10 terrestres contabilizándose más de 50 horas de vuelo de los 3 helicópteros de la Misión, y casi 11.000 kilómetros recorridos.

"Esto era lo que los colombianos no creían": Santos

“Al día de hoy, se concluyó también la destrucción de todo el material inestable que se encontraba en los 26 campamentos, incluyendo minas antipersonales, granadas, explosivos caseros y pólvora, entre otros. En cuanto a las operaciones de caletas, a la fecha se tiene información sobre 873 de las cuales 510 han sido ejecutadas de manera exitosa”, indicó Arnault.
Por su parte, el presidente de la República, Juan Manuel Santos, manifestó que así se comienza con al construcción del nuevo país, “ocho meses después de firmar el acuerdo estamos viendo la terminación de la dejación de las armas. Eso es un tiempo record. Hoy efectivamente es el último suspiro de ese conflicto, con esta dejación de armas, con los últimos contenedores, el conflicto realmente termina y comienza una fase nueva en la vida de nuestra Nación”.

Santos personalmente le dio la salida de la zona a los dos camiones que llevaban los contenedores en los cuales se pusieron las armas y los explosivos, los cuales llegarán a una bodega central que tiene la ONU, en donde ya están la mayoría de las armas y algunos explosivos que no se destruyeron.

El presidente Santos estuvo acompañado por el Alto Comisionado para la Paz, Sergio Jaramillo; el sucesor en ese cargo, Rodrigo Rivera y el Alto Consejero para el Posconflicto, Rafael Pardo.

“Esto era lo que los colombianos no creían que fuera a pasar”, sostuvo el mandatario quien además expresó que “perseverando vamos a conseguir lo que todos estamos queriendo”.

En el acto también intervino el negociador de las Farc, Iván Márquez, quien sostuvo que esta es otra muestra más de que ese grupo está cumpliendo, pero reclamó del presidente Juan Manuel Santos que se les cumpla con la seguridad que requieren los ya desmovilizados, esto porque ya han sido asesinados varios de sus militantes, incluso en predios cercanos a las mismas zonas en donde operaron las ZVTN.

Al respecto, el presidente Santos manifestó que “el Gobierno está absolutamente comprometido a que la seguridad llegue a las zonas. En una transición se presentan problemas”.

Las Fuerzas Militares y la Policía Nacional iniciarán un proceso no solo para fortalecer la seguridad sino también para llevar desarrollo social a las comunidades de las zonas veredales, que a partir de hoy se denominan ‘zonas territoriales de capacitación y reincorporación’.

Así lo anunció el Presidente desde la vereda Pondores, Fonseca (La Guajira). “En todas estas unidades habrá un pelotón de acción integral y un pelotón de construcciones. ¿Eso qué quiere decir? Que nuestro Ejército, los miembros de nuestra Fuerza Pública, pero especialmente los miembros de nuestras Fuerzas Militares, van a iniciar todo un proceso de ayudarles a las comunidades en sus dificultades diarias, que no tiene que ver estrictamente con la seguridad sino con su desarrollo social, su vida cotidiana”, dijo.

El mandatario explicó que la acción integral de la Fuerza Pública en dichas áreas “tiene que ver con la salud o con la construcción de una carretera”, y citó, por ejemplo, que los ingenieros militares “van a ayudarles a las comunidades en las obras que necesitan”.

Tras el acto, el presidente ofreció un saludo a las tropas y explicó ante ellas la forma como las mismas seguirán operando en un puesto de mando de las Fuerzas Militares y la Policía Nacional, “vamos garantizar la seguridad a todos los habitantes, sean miembros de las Farc o no, a todas las comunidades”.

Según Santos en cada zona veredal (que ya lo dejan de ser desde mañana) habrá una unidad compuesta por entre 200 y 240 miembros de las Fuerzas Militares y 170 de la Policía Nacional. Allí funcionarán las ‘carpas azules’, donde la comunidad “podrá ir a reclamar, a pedir ayuda seguridad. Ahí está de alguna forma reunida toda la presencia del Estado, pero sobre todo la presencia de la Fuerza Pública”.

Reiteró además que a nivel nacional se ha puesto en marcha el Plan Victoria, mediante el cual cerca de 85 mil miembros de la Fuerza Pública “se han desplegado por todo el país precisamente para ir ocupando aquellas zonas, aquellos territorios que hoy están siendo dejados por las Farc, para ejercer lo que se llama el control militar de área, el control del Estado de esas áreas y poder garantizar la seguridad”.

En cifras

Como resultado de las operaciones de extracción de caletas, la Misión de la ONU en Colombia en el terreno tiene contabilizado hasta la fecha:

- 795 armas.
- 293.803 municiones de diferentes calibres de armas ligeras.
- 22.077 kilogramos de explosivos diversos.
- 25.216 metros de cordón detonante y mecha lenta.
- 3.957 granadas, de mano y de 40 mm.
- 1.846 minas antipersonal.
- 27.282 iniciadores-estopines.
- 1.130 municiones de mortero, entre los que se identifican de 81 mm, 60 mm y cohetes.