ARGEMIRO PIÑEROS MORENO
COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ
El divorcio político entre el presidente, Juan Manuel Santos y su vicepresidente, Germán Vargas Lleras, quedó prácticamente oficializado gracias a la reforma tributaria, que está solo al paso de la conciliación para convertirse en realidad.
Fue el tema del impuesto del IVA, el aumento del 16% al 19%, lo que llevó a que el partido Cambio Radical se saliera de la aprobación de la reforma tributaria pasadas las 7:00 de la noche, y claro como todo divorcio, llevó a que hubiese una pelea.
La decisión política de Cambio Radical, según se supo, fue fríamente pactada con el propio vicepresidente Vargas. El senador Germán Varón, el hombre fuerte de Vargas en el Congreso, se encargó de decir en la plenaria que ese tipo de ‘regalo’ no se le podía dar a los colombianos en el cierre del año, por lo que indicó que no votaría el aumento del IVA.
Eso provocó una dura reacción del senador Roy Barreras, hombre cercano al presidente, Juan Manuel Santos, quien reclamó el compromiso de Cambio Radical en el apoyo a este incremento del impuesto, y cuestionó esa posición de rechazo del vicepresidente Vargas.
Lo planteado por Barreras llevó a que el senador Juan Carlos Restrepo, también de Cambio, amenazara al Gobierno con que si no les servía los votos de su partido se salían y así fue.
Luego el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, intentó acercar a la bancada de Vargas Lleras, pero se volvieron a caldear los ánimos, al punto que hubo intentos de manoteo del senador Bernabé Celis al ministro.
Luego de eso con 45 votos conseguidos en La U, el conservatismo, el liberalismo, Opción Ciudadana y parte de la Alianza Verde, se aprobó el aumento del IVA en tres puntos. Los negativos fueron del uribismo y el polo.
De ahí en adelante se avanzó en la discusión y se aprobó sin mayores modificaciones.
Más impuestos
Entre las novedades las toallas higiénicas y tampones tendrán IVA, pero este será solo del 5%. Mientras tanto, el impuesto para el papel higiénico y los pañales será del 19%.
Asimismo, el Legislativo aprobó un impuesto al consumo del 8% para las motocicletas con cilindraje superior a 200 cc.
El Senado también aprobó el artículo que crea nuevos impuestos a los combustibles.
En la discusión también se aprobó el monotributo, un tributo opcional que sustituye el impuesto sobre la renta y complementarios a cargo de los contribuyentes que opten voluntariamente por acogerse al mismo.
Este tributo busca formalizar a los pequeños y medianos comerciantes, según el ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas.
El recaudo se destinará a la financiación del aseguramiento en el marco del Sistema General de Seguridad Social, en Salud y en Riesgos Laborales.
La conciliación de la reforma tributaria será el próximo martes.
Así avanzó la sesión
Ante el ambiente negativo que empezó a tomar en el Senado la aprobación de la reforma tributaria, el presidente, Juan Manuel Santos, tuvo que adoptar una estrategia de última hora, dedicar él y todos sus ministros la atención al trámite de la misma.
Lo primero que decidió Santos fue no viajar a Quibdó, en donde estaría en actos de gobierno, y a la vez llamó a todos sus ministros para que se fueran al Congreso a acompañar al ministro de Hacienda, Mauricio Cárdenas, en la tarea de que se aprobara la reforma.
Durante toda la semana Cárdenas solo había estado acompañado del ministro de Minas, Germán Arce, quien tenía interés en la ley por temas que se relacionan con su cartera.
Pero desde antes de medio día de ayer el desfile de ministros comenzó. Llegó el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, a quien también le habían formulado duros cuestionamientos el miércoles.
De la misma manera hicieron presencia la ministra de Vivienda, Elsa Noguera; la ministra de Cultura, Mariana Garcés; la de Comercio, María Claudia Lacouture; el ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri y hasta el director de Planeación Nacional, Simón Gaviria.
En la noche del miércoles había estado en ambas plenarias el secretario general de la Presidencia de la República, Luis Guillermo Vélez, y hasta el consejero presidencial Rafael Pardo.
Destacado
Tras unas 13 horas de debate, la plenaria de la Cámara aprobó el miércoles, por 78 votos contra 14, la reforma tributaria. En el debate, el pleno de la cámara baja aprobó el articulado de 367 puntos, que tenía como tema álgido el aumento de tres puntos del IVA, que fue avalado por 77 votos a 25, pasando así del 16 al 19%.
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