COLPRENSA| LA PATRIA | Bogotá
Una ‘jugada estratégica a tres bandas’ sería lo que busca el Eln con el secuestro de cinco extranjeros y dos colombianos en las últimas dos semanas.
En primer lugar, el Eln buscaría presionar al Gobierno del presidente Juan Manuel Santos para iniciar un proceso de paz en la misma mesa con las Farc o en un proceso distinto.
De otra parte, también pretendería desestimular la inversión extranjera en el país, pues al igual que las Farc, la guerrilla considera que la presencia en nuestro territorio de empresas petroleras fortalece al Estado con inversión destinada a robustecer su aparato militar.
Pero también quiere apoyar la posición de las Farc en la mesa de negociación para que el Gobierno ceda en temas que no fueron acordados previamente en la agenda que se negocia en La Habana (Cuba).
El Eln tiene en su poder a los geólogos peruanos Javier Leandro Ochoa y José Antonio Madani; al canadiense Jernot Wober y a los colombianos William Batista, Manuel Zabaleta.
Estas personas fueron secuestradas el 18 de enero pasado en Norosí, sur de Bolívar, cuando trabajaban para la compañía minera Geo Explorer.
Y ayer la cancillería alemana confirmó el plagio de los hermanos Breur Uwe y Breuer Günther Otto, de 72 y 69 años de edad, respectivamente.
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