Se abre campo para la aspersión aérea

Efe | LA PATRIA | Bogotá

Tras conocerse la decisión de los Estados Unidos de respaldar a Colombia en la lucha contra las drogas, el canciller, Carlos Holmes Trujillo, insistió en la necesidad de que el país retome la aspersión aérea para acabar con los cultivos ilícitos.

"Para el Gobierno Nacional la aspersión aérea es otra forma de avanzar en la erradicación de los cultivos ilícitos sin exponer la vida y seguridad de quienes adelantan esta tarea", agregó el ministro de Relaciones Exteriores quien no mencionó de forma directa el químico glifosato cuyo polémico uso es objeto de debate en el país.

Señaló que es significativo que la Corte Constitucional haya abierto la puerta para el uso de esta herramienta cumpliendo los protocolos necesarios que garanticen el cuidado del medioambiente y la salud de humana.

La tendencia de crecimiento de los cultivos de coca en Colombia se frenó en el 2018, pero la cifra de hectáreas sembradas sigue en máximos históricos pese a que pasó de 171 mil en el 2017 a 169 mil el año pasado, según un informe de la Oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (Unodc) divulgado hace una semana.

Esos índices generaron fricciones entre EE.UU. y Colombia, socio estratégico en la región, que llevaron a Trump a reprochar en varias ocasiones la situación e incluso a criticar a Duque por su política antidrogas.

Es por eso que el representante de la Unodc, Pierre Lapaque, celebró, al presentar el informe en Bogotá junto al presidente Duque, que la tendencia se haya "interrumpido", aunque señaló que los cultivos siguen en niveles históricos por "un efecto de compensación".

Con prohibición

El Gobierno asegura que una forma para reducir esa cifra es la aspersión aérea de glifosato, cuyo uso para erradicar los sembradíos de coca está suspendido desde el 2015 por una sentencia de la Corte Constitucional que lo ordenó luego de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo incluyera entre los plaguicidas que pueden causar cáncer en humanos.

Sin embargo, ese fallo -revisado el mes pasado por solicitud del Gobierno y tras lo cual la Corte reiteró la competencia del Consejo Nacional de Estupefacientes para decidir sobre la reanudación de las aspersiones- señala que no se puede fumigar en Parques Nacionales Naturales, reservas naturales, páramos o cerca a yacimientos de agua.

Según cifras del Gobierno colombiano, entre el 7 de agosto y el 31 de diciembre del 2018 se erradicaron 30 mil 435 hectáreas de coca y entre el 1 de enero y el 11 de julio se erradicaron 40 mil 606 hectáreas "es decir en lo corrido del Gobierno van 71 mil 41 hectáreas de coca erradicas", recordó Trujillo.

"Por primera vez en siete años Colombia comenzó con tendencia a la baja la cantidad de hectáreas sembradas de coca pasamos de un crecimiento anual del 30% a una reducción de 1,2% en el territorio afectado", apostilló Trujillo.

Piden proteger a la población

La Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO, en inglés) defendió la necesidad de proteger a la población del glifosato y cita un metanálisis publicado este año por investigadores estadounidenses que concluye que existe un "vínculo convincente" entre el herbicida y casos de linfoma no hodgkiniano, y destaca además que Francia se ha comprometido a prohibir su uso.

El "principio de precaución" implica que "existe la responsabilidad social de proteger a los ciudadanos de cualquier peligro, una vez las investigaciones científicas detectaron un riesgo plausible", señala la Federación Internacional.

El uso de ese producto por la industria agraria levantó polémica después de que en mayo la justicia estadounidense impusiera una cuantiosa multa a Bayer, propietaria de la compañía Monsanto, al considerar que el glifosato causó cáncer a una pareja de ancianos.

En total, se calcula que unas 13 mil 400 personas han demandado o forman parte de demandas contra la farmacéutica alemana en Estados Unidos en la causa por el herbicida.