'Paras' cuadraron cómo declarar en Justicia y Paz

COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ

Los jefes paramilitares Salvatore Mancuso, Freddy Rendón Herrera (alias El Alemán) y Rodrigo Tovar Pupo (alias Jorge 40), planearon, de acuerdo con una grabación que reveló ayer Caracol Radio, cómo serían sus declaraciones ante los jueces de Justicia y Paz. El hecho al parecer ocurrió antes de que los extraditaran a Estados Unidos en 2008.

En la cinta se refieren al exvicepresidente Francisco Santos, quien de inmediato rechazó los señalamientos.

Sobre el primer punto, se les escucha referirse a la forma como confesarán sus crímenes en Justicia y Paz. La idea era pedir perdón por cada ejecución.

El primero que interviene, según la emisora, es El Alemán, quien explica que para financiar sus actividades apelaron al cobro de extorsiones a los contratistas, pero niega haber robado los recursos de los municipios, algo que, según él, sí hacía la guerrilla al manejar los recursos de las localidades a través de pactos con los alcaldes.

Mancuso admite la penetración de las autodefensas en la política entre 1998 y 1999, y dice que impusieron muchos alcaldes en el norte del país a partir de acuerdos con grupos políticos que contribuían económicamente con ellos.

Pese al poder ejercido con las armas, no pudieron controlar a algunos alcaldes, como lo reconoce El Alemán, quien asegura que estos funcionarios no cumplían los pactos y, en cambio, terminaban robando los fiscos y se volvían sus enemigos. En ese sentido, menciona a Héctor Acosta, alcalde de Tierralta (Córdoba), asesinado en febrero de 2001.

Los jefes paramilitares también explican cómo incidieron en los proyectos de los municipios y las comunidades para diseñar los planes de desarrollo. El hombre a quien la emisora identifica como ‘Jorge 40’ admite que en medio de ese trabajo fue un error de las autodefensas no haber formado su propio partido, y que lograron suplantar tareas del Estado: algunos empresarios no pagaran en efectivo impuestos como el predial, sino en especie para asegurar la ejecución de las obras.

En el Congreso

Mancuso también habla de la penetración de las autodefensas en el Congreso y la manipulación que logró gracias a las órdenes que les impartía a tres congresistas. Menciona a la ex representante a la Cámara Eleonora Pineda (condenada por nexos con paramilitares).

Él mismo Mancuso le pregunta a Jorge 40 sobre la financiación de las autodefensas mediante recursos entregados por sectores de la producción, y este menciona que a empresarios del campo que tuvieran terrenos superiores a 100 hectáreas les cobraban entre $5 mil y $10 mil por hectárea. Asegura que no se trataba de una extorsión, sino de una contribución concertada. Después se refiere al caso de Necoclí (Antioquia) donde los ganaderos les compraron los primeros fusiles.

Mancuso asegura que en Córdoba las contribuciones fueron voluntarias, pero cuando desalojaron a la guerrilla la gente dejó de pagar, así que optaron por usar la fuerza. Los tres jefes se declaran dispuestos a entregar las listas de los “benefactores”. Aseguran que son extensas y consideran que las autoridades no podrían judicializarlos a todos.

Hablaron, así mismo, de carteles de abogados que afectaban las finanzas de los municipios y que, según Mancuso, manejaban las cuentas de cobro a los municipios, embargaban cuentas bancarias y los hacían financieramente inviables. Los paramilitares dicen haber combatido a esos carteles.

Sobre Francisco Santos

Al hablar de los vínculos de los paramilitares con políticos, los tres jefes de las autodefensas mencionan reuniones de miembros de su organización con el exvicepresidente de la República Francisco Santos (durante el mandato de Álvaro Uribe), la primera de las cuales se habría producido con Mancuso en 1997.

De acuerdo con la grabación, Santos le pregunta a Mancuso sobre Carlos Castaño y las gestiones para montar autodefensas en Bogotá y Cundinamarca. En el audio, Mancuso asegura que Santos le pide que en sus acciones las autodefensas no cometan más de tres crímenes y que no desaparezcan los cuerpos para que no metan en problemas a la fundación que entonces dirigía (País Libre).

Mancuso agrega que Santos le pidió a Carlos Castaño que dejara ir a Mancuso a Bogotá a dictar una charla en el diario El Tiempo, que para ese entonces era de la familia Santos. Jorge 40 confirma que personalmente se reunió con Francisco Santos en un restaurante del norte de Bogotá.

Frente a estas revelaciones, el exvicepresidente expresó ayer: “Queda uno como si fuera un asesino, con el alma untada de la que sabemos”.

Reiteró que sí se reunió con excomandantes paramilitares, pero en calidad de periodista y defensor de Derechos Humanos, y no para pactar crímenes. Recordó que la Fiscalía lo investiga desde el 2006 por sus supuestos vínculos con paramilitares y que ese proceso ha avanzado poco o nada.

“Pareciera que la Fiscalía quisiera mantenerme como indiciado”, dijo Santos, y añadió que los ‘paras’ ajustan todo lo que dicen. “Han cambiado su versión varias veces y cuando mis abogados han viajado a Estados Unidos y les han pedido pruebas, no han aportado nada”.