EFE | LA PATRIA | Bogotá
Un campesino murió y tres más resultaron heridos en una operación del Ejército para erradicar cultivos de coca en el departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, informaron ayer organizaciones sociales.
La Asociación Campesina de la región del Catatumbo (Ascamcat) y la Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Amapola y Marihuana de Colombia (Coccam), dijeron en un comunicado conjunto que Digno Emérito Buendía Martínez, de 44 años, murió en una zona rural de Cúcuta, la capital departamental.
La Segunda División del Ejército aseguró que "tropas adscritas a la Trigésima Brigada se encontraban en labores de erradicación cuando fueron atacadas mediante acciones de vía de hecho por algunas personas que se encontraban en el lugar".
La información añade que también hay un militar herido y que una vez conoció la situación "se informó de los hechos" a la Procuraduría, la Defensoría del Pueblo y la Fiscalía para las correspondientes investigaciones.
"La Segunda División manifiesta su absoluta disposición para apoyar a las autoridades y entidades de control en lo que requieran para adelantar los procesos de investigación", apostilló la información.
Buendía era miembro de la Junta de Acción Comunal del caserío El Tutumito, de Ascamcat y de Coccam.
En los hechos, que son materia de investigación, también resultaron heridos de bala los campesinos Miguel Hernández León, Juan José Orozco y Jimmy Alberto González.
"Encendemos la alerta a las autoridades que el Ejército Nacional podría incurrir en nuevos usos excesivos de la fuerza y están intentando justificar su accionar con un supuesto enfrentamiento cuando es un hecho totalmente falso", se indicó en el comunicado conjunto de las asociaciones campesinas.
Las organizaciones informaron que los campesinos decidieron "conformar un asentamiento campesino" con el fin de "exigir sus derechos y el cumplimiento del punto 4 del Acuerdo de Paz en materia de sustitución de cultivos".
Este punto del acuerdo de paz firmado en 2016 entre el Gobierno y la extinta guerrilla de las Farc contempla programas de sustitución de cultivos a cambio de proyectos productivos y rutas de comercialización para no necesitar de la hoja de coca.
En la información se añadió que ante la situación los campesinos retuvieron a un militar.
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