"La paz no la traen, hay que salir a buscarla"

Colprensa | LA PATRIA | Bogotá

Ayer, al mediodía, en la Plaza de Bolívar de Bogotá, se llevó a cabo la movilización nacional por el ‘Día Mundial de la No violencia’, la cual busca que en 24 horas no se registre la muerte de ninguna persona en hechos violentos.

Reconocido por su ‘Escopetarra’ y porque ha despertado el interés y la sensibilidad de los colombianos por la paz, el músico bogotano Cesar López volvió a alzar su voz por la búsqueda del fin de la violencia, en medio de los anuncios del Gobierno y las Farc de los acercamientos a un proceso de paz.

En busca de hacer un cambio de mentalidad en los colombianos, López se propuso hacer un llamado al país para que se logre el respeto a la vida, a través de la iniciativa ‘24 horas con 0 muertes violentas', la cual pretende que la sociedad tenga un cambio en la resolución de conflictos interpersonales y que se use el arte como elemento transformador y de reparación. Lea detalles de la jornada en Caldas en la página 11A.

Construcción de paz

- ¿Cómo nace ‘24 horas con 0 muertes violentas’?

El año pasado terminé un disco que se llama ‘Toda bala es pérdida’, que tiene contenidos sociales y que además trae una cartilla para que el oyente vaya escuchando y entendiendo cifras, estadísticas, mapas sobre el país. Me llamó mucho la atención todos esos viajes que se hicieron para el disco. Fueron casi cuatro años viajando y conociendo la percepción que tiene la gente sobre la violencia, las personas piensan que la violencia tiene que ver con el conflicto armado y no con la violencia callejera. Según Medicina Legal, el 6,23% de homicidios en Colombia son atribuibles al conflicto armado, son como 17 mil homicidios al año o muertes violentas.

- ¿Qué función tiene la música en la construcción de caminos de paz?

El primer oficio de la música es inspirar gente. El segundo es que la música sirve para contar historias, uno sirve para ser un puente para contar una cosa que vio en Quibdó y lo puede ver una persona que entró en un concierto en Bogotá. El objeto artístico es generar una comunicación con uno mismo para poder construir caminos de paz.

- ¿Qué función desempeña el arte en el proceso de reconciliación?

En muchos niveles, cuando hemos trabajado con desmovilizados, sabemos que no vamos a sacar Shakiras o Juanes, pero que a través de la música vas a sanar heridas y sino allí van encontrar un proyecto productivo en su vida.

-¿Qué pretende a través de su activismo musical?

Yo me siento muy bien sirviendo, le da sentido a mi vida estar tocando, a pesar de que mi ejercicio artístico es un poco convencional, no toco grandes conciertos, yo toco en una caja de gaseosa, en una esquina del barrio Siloé en Cali, Apartadó, Granada (Antioquia), escenarios donde pocos artistas llegan, precisamente porque no les pueden ofrecer buenas condiciones, pero a mi llena, me hace sentir útil, siento que nuestras canciones se nutren.

¿Cuál es el mensaje para los jóvenes?

"Uno tiene que pegarse una ‘espabilada’, como dicen las abuelas, de ver en qué país está, qué es lo que esta pasando y cuál podría ser mi rol. Uno no se puede quedar esperando que le llegue la información, el conocimiento o la creatividad, uno tiene que salir a buscarla, además, eso que la paz se hace o que alguien nos la trae, no es real, hay que salir a construirla"