Gobierno da reversazo en nuevo impuesto para nivelar las compras digitales

COLPRENSA | BOGOTÁ | LA PATRIA

A última hora el Gobierno Nacional dio un reversazo con el nuevo impuesto que pretendían incluir en la reforma tributaria para pagar un nuevo gravamen a la hora de realizar las compras a través de plataformas digitales que no estén residenciadas en Colombia. Pese a que en la mañana el director de la Dian, José Andrés Romero, anunció la medida, al final en la ponencia que se radicó para segundo debate no se incluyó la decisión.

Según fuentes cercanas a la discusión, se decidió eliminar este artículo para evitar, eventualmente, incumplir tratados de libre comercio y posibles sanciones de la Organización Mundial de Comercio.

El objetivo inicial del Gobierno era que este impuesto no afectara las compras cuando el vendedor estuviera residenciado en el país. El avance de la idea era tal que los cálculos oficiales indicaban que este impuesto podría generar alrededor de $250.000 millones al año.

En la mañana, Romero había explicado que el artículo se estaba incluyendo en la ley “como una medida para nivelar el impuesto que pagan los colombianos, que son los que pagan un local o impuesto sobre la renta en Colombia, versus el impuesto que hoy en día no están pagando precisamente estas plataformas digitales”. Desde el sector oficial explicaban que la idea era no dejar pasar la oportunidad de ser parte de una tendencia mundial, pues otros países como Hungría (7,5%) y Francia (3%) ya tienen implementado un Impuesto a los servicios digitales (DST por sus cifras en inglés) y otras naciones ya han propuesto la medida aunque aún no esté vigente, como Turquía (7,5%) o Bélgica (3%). La semana pasada, la Unión Europea anunció su intención de seguir evaluando la imposición de DST para 2020.

“La Unión Europea ya nos abrió la ruta. A partir de esta Ley cualquier compra en plataformas implicará un impuesto al consumo de 4%. Las transacciones están todas tasadas, porque se pagan con tarjeta de crédito, y va a quedar muy fácil para la Dian asegurar esos recursos. De lo contrario se convertirían en una competencia desleal para los colombianos”, comentó el congresista por el Centro Democrático, Óscar Pérez, previo a la decisión de sacar el artículo.

El debate avanzó a tal punto que otros sectores del Legislativo, como el Partido Conservador, anunciaron su oposición directa. “No vamos a permitir que se incluya en la Ley de Crecimiento un impuesto de 4% a compras que se hagan por internet. Esto alejaría al país de los mercados de la era digital. Colombia no puede perder los avances alcanzados. Ya hay normas tributarias sobre el comercio electrónico”, criticó el senador David Barguil. Según conoció LR, inicialmente el artículo establecía que se incluiría “como hecho generador del impuesto al consumo la venta de bienes importados a Colombia bajo la modalidad de tráfico postal, envíos urgentes o mensajería expresa, y la prestación de servicios a través de las plataformas digitales”.

Antes de que conociera la ponencia, María Fernanda Quiñones, presidente de la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico, había criticado la idea y dijo que como estaba “redactado el artículo cobijaría todo, aplicaría para bienes o ventas de servicios”, sin distinguir aquellas plataformas que ya pagan IVA. “Era un anuncio lamentable que mostraba gran desarticulación al interior del Gobierno”, agregó Quiñones.