Argemiro Piñeros Moreno
Colprensa | LA PATRIA | Nueva York y Washington
El dicho popular de borrar con el codo lo que se escribe con la mano, es el que de mejor forma puede resumir lo que le ocurrió esta semana al presidente Iván Duque, quien buscó aprovechar su presencia en la Asamblea General de las Naciones Unidas para fortalecer el cerco internacional contra Maduro.
Hubiera podido ser la jugada más audaz en contra del dictador venezolano desde que se denunció la ilegitimidad de su nuevo mandato en enero pasado, pero terminó como un serio revés para el mandatario colombiano.
Mas que hablar de la implementación del acuerdo de paz o de narcotráfico, Duque optó porque su principal mensaje fuera sobre la situación de Venezuela.
La herramienta que preparó Duque para presentar ante la Asamblea General de la ONU, fue un dossier de 228 páginas que contiene, según dijo, información precisa sobre los vínculos de Maduro con la guerrilla colombiana: la presencia del Eln en su territorio, la existencia de 20 pistas de aterrizaje al servicio del narcotráfico y el apoyo a las disidencias que lidera el exnegociador de las Farc, Iván Márquez, junto a Santrich y el Paisa.
Imágenes equivocadas
La contundencia que quería buscar Duque con su denuncia se vino abajo unas horas después.
El periódico El Colombiano reveló que una foto usada en el informe la recibió un periodista en el 2015 de inteligencia militar para ilustrar un artículo sobre reclutamiento de menores. Según el diario, la foto fue tomada en el Cauca y no en el estado del Táchira, como se aseguraba en el informe.
Otra imagen, que ilustraba una casa pintada con aerosol con las siglas del Eln, y que supuestamente correspondía a un ataque guerrillero en el estado venezolano de Bolívar, la reclamó como suya Luis Robayo, fotógrafo de AFP. Aseguró que la tomó en Colombia, en la región del Catatumbo, en el 2018.
El presidente pretendió restarle importancia a las inexactitudes del informe. "Más allá de la foto que me parece que es anecdótica dentro del dossier, lo que realmente el informe muestra es la ubicación de los cabecillas en Venezuela, la ubicación de las pistas y rutas del narcotráfico, denuncias de ciudadanos venezolanos y adicionalmente las reuniones clandestinas que han tenido miembros de esas organizaciones criminales para planear actos delictivos hacia Colombia desde territorio venezolano”, manifestó Duque.
Y el comandante de las Fuerzas Militares, general Luis Fernando Navarro, salió ayer ante los medios a reiterar todas las evidencias que tiene la inteligencia colombiana del apoyo de Maduro a los grupos irregulares.
La vicepresidenta venezolana, Delcy Rodríguez, acusó ayer a Iván Duque en la ONU de mentir sobre Venezuela. "El presidente de Colombia trajo aquí un material que dice él, era la prueba de que en Venezuela albergamos irregulares colombianos, hemos llegado a tal nivel de irrespeto de venir a mentir ante esta comunidad".
Sin sustento
Analistas y comentaristas políticos no bajan de vergüenza los calificativos que usan para referirse a este error en la estrategia de Iván Duque en contra del Gobierno Maduro.
El columnista y profesor universitario Jhon Mario González, además de coincidir en que fue un "oso", sostiene que este episodio terminó dándole argumento al régimen de Maduro para mostrar que las acusaciones de Colombia (así sean ciertas), no tienen sustento en la realidad.
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