Canciller sale al paso de las criticas por reunión con Maduro

ALFONSO OSPINA Y LORENA BELTRÁN

COLPRENSA | LA PATRIA | BOGOTÁ

María Ángela Holguín, ministra de relaciones exteriores, sigue en la maratón diplomática en que la metió el cierre de la frontera con Venezuela.

Volvió de Quito en la madrugada de ayer, para estar en la mañana presente en la Comisión Segunda de la Cámara, siempre respondiendo las inquietudes por esa crisis humanitaria. Hoy estará en Caracas, en la primera de las reuniones de trabajo programadas para la normalización progresiva de la frontera.

Holguín rechazó las críticas según las cuales el encuentro de presidentes no trajo soluciones concretas. Explica que ese no era el escenario adecuado para ello y asegura que las salidas empezarán a ser construidas desde hoy por los equipos de ministros.

- ¿Qué ministros viajan y qué buscarán establecer en Caracas?

Los ministros de Hacienda, Minas y Defensa, el director de la DIAN, el presidente de Ecopetrol y yo. En Quito lo que se inició fue una primera conversación de unos temas puntuales. Acordamos realizar una reunión de ministros para empezar a buscar soluciones, no solo coyunturales, sino también para esos problemas estructurales como combustible, contrabando, narcotráfico y las organizaciones criminales que delinquen en la zona. Esperamos que la reunión de hoy arroje resultados.

- ¿Hay un cronograma definido para cumplir esa normalización de la frontera?

La reunión que se realizó en Quito fue una invitación a un diálogo, no fue una reunión bilateral en la que se tomaran decisiones de cada uno de los temas. Después de la reunión de los presidentes nos reunimos a nivel de ministros para una primera aproximación, pero la idea es que ya los equipos se sienten desde hoy a mirar cómo se realizará esa normalización de la frontera.

- ¿Qué alcances tiene esa frase normalización progresiva de la frontera?

En la reunión del lunes no pedimos la reapertura inmediata de la frontera; sabemos que es un tema prioritario, pero estamos convencidos de que hay que trabajar para abrirla, y no abrirla para después trabajar. Hemos visto que hay que tomar muchos correctivos y esperamos que se vayan tomando. De esa manera, cuando se haga la reapertura tendremos una frontera mucho más cordial y con menos problemas de los que tenemos hoy en día. Creo que eso va a ser pronto, pero las decisiones que se tomen deben ser de largo plazo, no se trata de abrirla para seguir en lo mismo.

- ¿Por qué no hubo una mención explícita de la situación humanitaria de los deportados?

Gran parte de la reunión fue justamente para tratar la situación humanitaria, esa en la que se vieron vulnerados los derechos de los colombianos, cuando se realizaron deportaciones masivas contrarias al derecho internacional. El presidente, Juan Manuel Santos, fue muy enfático en su rechazo a las violaciones de los derechos humanos, a la forma como trataron a los colombianos y a la manera en que fueron sacados de Venezuela. Por eso en el punto dos de la declaración quedó plasmado “realizar una investigación de la situación de la frontera” y nos referimos a investigar todo lo que pasó en el último mes, y estarán Ecuador y Uruguay ayudando en esto. Debemos trabajar en soluciones y en mecanismos para que nunca más vuelva a pasar una cosa de estas.

- ¿Cómo garantizar que esta vez el Gobierno de Venezuela cumpla el cronograma de reuniones?

Sabemos que a veces no es fácil cumplir los retos que se plantean, pero hay una voluntad política y eso es muy importante. Como lo dijeron los presidentes Santos y Maduro: o trabajamos conjuntamente o no hay posibilidad alguna de que logremos erradicar los males que hay en la frontera. Además recuerde que manifestamos que vamos a estar acompañados por Uruguay y Ecuador en las próximas reuniones.

- ¿Todavía considera que ésta es la oportunidad de dejar de depender de Venezuela?

Creo que en este momento el país tiene una gran oportunidad para avanzar en lo que esas comunidades han solicitado del Estado colombiano y para buscar salidas a situaciones que han generado que en algunos aspectos se dependa de Venezuela. Es muy importante que los colombianos vivamos en Colombia, integrados a lo que el país puede y debe ofrecer.

Criticas

Dos analistas comparten la idea de que la reunión Santos-Maduro apenas sirvió para bajarle un poco la tensión a la crisis, pero no arrojó resultados concretos. Más aún, dicen que este encuentro apenas sirvió para la foto, pues a ambos mandatarios les conviene mostrarse como conciliadores por estar en medio de procesos electorales internos.

“Mientras las relaciones binacionales sigan estando contaminadas por las elecciones (legislativas en Venezuela, territoriales en Colombia), los altibajos se seguirán presentando, porque eso forma parte de la política internacional de Venezuela”, sostiene el catedrático Ricardo Abello Galvis. Agregó que el resultado de la reunión fue tan precario, que eso se reflejó en la poca euforia del presidente Santos, quien se mostró cauto y tranquilo, lo que hace prever que el avance para solucionar las diferencias fue mínimo. A su turno, el internacionalista Rafael Nieto Loaiza comparte esa idea, pero agrega que el presidente colombiano se quedó corto en defender a los colombianos. “Para Santos la soberanía y la dignidad nacionales están subordinadas al proceso de paz, que quiere sacarlo adelante como sea, sin importarle nada más”, concluyó.