Bogotá se paralizó por el caos

EFE|LA PATRIA|BOGOTÁ*

29 detenidos, destrozos en vidrieras y caos en el tráfico automotor se registraron ayer en Bogotá, en una jornada de protesta de miles de usuarios por el servicio de transporte masivo Transmilenio.

"Lo que empezó como una protesta pacífica, con arengas y pancartas en contra de las deficiencias que se presentan en Transmilenio, se transformó poco a poco en actos de vandalismo y bloqueo contra el sistema", señaló la Alcadía Mayor en un comunicado de prensa.

Las manifestaciones en contra del servicio de los autobuses articulados bogotanos se iniciaron a primera hora del día, cuando centenares de los usuarios, principalmente estudiantes, ocuparon las estaciones de los autobuses e impidieron su salida.

Los usuarios del popular transporte bogotano bloquearon, además, avenidas de sectores del sur y el noroeste de la ciudad, principalmente.

Según voceros de los manifestantes, la protesta tiene su origen en el retraso de las rutas en horas punta, el costo de las tarifas, el escaso cubrimiento de la red, la insuficiente capacidad de los vehículos y la falta de alternativas de transporte público.

La situación la aprovecharon inadaptados, según la Policía, quienes se dedicaron a robar las cámaras de seguridad de las estaciones, en algunas hurtaron los dineros de las taquillas y en muchas quebraron los vidrios.

“Eso no lo puede aceptar Bogotá, vandalismo, piedra, papas explosivas y agresiones. Ya no están protestando por un mal servicio, están traspasando los linderos y usaremos los términos de justicia existentes”, dijo el secretario de Gobierno de la ciudad, Antonio Navarro, al rechazar los hechos en los que entre muchos otros, resultaron afectados un reportero gráfico y un videógrafo de Colprensa que cubrían los hechos.

“Tenemos los videos con muchachos y banderas, tenemos el listado con nombres de personas que dirigieron la primera protesta”, dijo el alcalde Gustavo Petro.

Las medidas

Según fuentes oficiales, unos 1.200 hombres de la fuerza pública y de escuadrones antidisturbios de la Policía fueron desplegados en distintos puntos de la ciudad para neutralizar los desórdenes.

El alcalde de Bogotá, Gustavo Petro; el secretario de Gobierno de la ciudad, Antonio Navarro, y el director de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, siguieron los bloqueos.

Ante las protestas, Petro insistió en que hay necesidad de "renegociar las condiciones" del servicio de Transmilenio y dijo que las personas que bloquean estaciones y calles impiden acuerdos directos con la ciudadanía.

Además, denunció que detrás de los sabotajes se ocultan intereses políticos del Partido Comunista y el Moir (Movimiento Obrero Independiente Revolucionario).

Ayer a las 6:00 de la tarde, mediante Resolución 086 de la Secretaría Distrital de Movilidad, la Alcaldía habilitó el uso de la Avenida Caracas para transporte de servicio público tradicional.

Por otra parte, Petro ordenó levantar la medida de restricción para los vehículos particulares, conocida como "pico y placa", para permitir que miles de personas puedan movilizarse.

Procuraduría advierte fallas en el sistema

Ante las protestas en Transmilenio, la Procuraduría indicó ayer que la cobertura en el sistema de transporte y el servicio no es el adecuado para los usuarios que a diario utilizan el medio para movilizarse, por lo que solicitó estudiar alternativas que permitan terminar con la inconformidad de los pasajeros.

Por lo anterior, el Ministerio Público espera en los próximos días reunirse con el alcalde de la capital de la República, Gustavo Petro, para entregarle recomendaciones y evitar que se presenten manifestaciones que colapsen la ciudad.

Para el Ministerio Público en estos casos prima la integridad de los usuarios y ante las posibles vulneraciones –señala- es función del operador del sistema prever la situación.

Polo niega ser organizador de las protestas

El Polo Democrático Alternativo aseguró ayer que ninguno de los directivos de esa colectividad promovió u organizó la jornada de protesta y vandalismo que se dio durante todo el día en la capital del país y que bloqueó el sistema de transporte masivo Transmilenio.

La declaración se dio luego del señalamiento que le hizo el alcalde Gustavo Petro a su anterior partido, pero en particular a la tendencia política del Moir, el movimiento que orienta al interior del Polo el senador por Caldas Jorge Enrique Robledo, su principal opositor.

La presidenta del Polo, Clara López, le dijo a Petro que “se serene y se ponga a gobernador porque parece que se le está saliendo la ciudad de las manos”.

Petro en su cuenta de Twitter, en la cual estuvo trinando de manera permanente durante el día, retó al Polo a pronunciarse sobre la responsabilidad en los acontecimientos de orden público.

“Dado que militantes del partido comunista y el Moir están detrás de los bloqueos espero pronunciamiento de Clara López y de bancada del Polo”, escribió el mandatario.

López además a Petro de estar haciendo cosas debajo de la mesa y “solapadamente” querer acusar al Polo Democrático.

Por su parte, el senador Jorge Robledo sostuvo que “con falsos positivos” el Alcalde quiere atender la crisis del mal servicio de Transmilenio.

“Falta en materia grave a la verdad el Alcalde Gustavo Petro cuando me echa la culpa a mí y a sectores del Polo Democrático Alternativo –incluida su Presidenta, Clara López– de las masivas protestas de los bogotanos en contra del pésimo servicio de Transmilenio”, indicó Robledo.

En ese sentido el alcalde Petro aseguró que durante las marchas fueron grabados varios manifestantes con banderas del Partido Comunista y del Moir, pero en criterio de Clara López, las mismas no las llevaban miembros del partido.

“Explosión en la Presidencia es hecho aislado”

Un hombre arrojó ayer dos explosivos frente a la Casa de Nariño, junto a la Plaza de Armas y cerca del Congreso, que no dejaron daños materiales ni humanos.

Según la fuente, el responsable cargaba una bolsa que fue revisada en el primer anillo de seguridad que da acceso a las calles circundantes de la Casa de Nariño, como se conoce la sede del Gobierno colombiano en Bogotá.

"Fue a unos 100 metros, a una manzana de distancia en dirección hacia la Plaza de Armas", precisó el funcionario, que se encontraba en el momento de las explosiones en el interior del edificio y quien constató que en ningún momento llegó a cundir el pánico.

Los servicios de seguridad retuvieron al desconocido y lo pusieron a disposición de la Policía Metropolitana de la capital, cuyos agentes lo interrogan en estos momentos.

Horas más tarde las autoridades constataron que el hecho no tuvo nada que ver con las protestas y se conoció que el responsable es un soldado retirado del Ejército Nacional, identificado como Leonel Díaz Carabalí, quien fue capturado y de inmediato judicializado por esos hechos.

*Con información de Colprensa.