Así fue la carrera criminal de alias Sebastián

COLPRENSA|LA PATRIA|BOGOTÁ

Con la captura ayer de John Ericson Vargas Cardona, alias Sebastián o alias Éric, presunto jefe de la llamada ‘Oficina de Envigado’, finaliza una larga carrera criminal que inició durante la época del cartel de Medellín.

Sebastian se dio a conocer en el 2008 cuando formó una disidencia de la Oficina de Envigado. Su carrera criminal se inició a comienzos de la década del 90 en la banda la Milagrosa, donde se destacó por su solvencia en el hurto callejero y de apartamentos, así como en actividades de piratería terrestre y halado de vehículos.

"Es un golpe mortal para la Oficina de Envigado", expresó el presidente Juan Manuel Santos durante declaraciones a la prensa en la Casa de Nariño.

El gobernante consideró que este grupo criminal, cuya estructura estaba debilitada por la detención en el pasado de algunos mandos medios, pierde la cabeza con la captura de Sebastián.

"Por eso es un golpe mortal", insistió Santos, y apuntó que su Gobierno autorizará la extradición del jefe mafioso a Estados Unidos, país que lo reclama bajo cargos de narcotráfico.

Vargas Cardona nació el 13 de octubre de 1973 y a los 18 años se convirtió, al lado de Maximiliano Bonilla Orozco (alias Valenciano), en uno de los sicarios más experimentados y de confianza de Diego Fernando Murillo Bejarano, alias don Berna, hoy en Estados Unidos tras su extradición, época para la cual el último hacía parte de los llamados Pepes (Perseguidos por Pablo Escobar)

Las buenas relaciones de Sebastián y Valenciano empezaron a deteriorarse en el 2007, cuando el entonces presidente Álvaro Uribe Vélez autorizó la extradición a Estados Unidos de los cabecillas paramilitares que eran reclamados por narcotráfico hacia ese país, entre ellos don Berna.

Sin una figura al mando de la Oficina de Envigado, considerada la banda más peligrosa del narcotráfico y de las Autodefensas en el Valle del Aburrá y parte del oriente antioqueño, se originaron disputas internas por asumir su jefatura.

Los cabecillas de esa organización Gustavo Upegui; Carlos Mario Aguilar, alias Rogelio (hoy preso en los Estados Unidos); Daniel Rendón Herrera, alias Mario (hoy preso); Mauricio Cardona López, alias Yiyo; Francisco Iván Cifuentes, alias Pacho Cifuentes; Fabio León Vélez, alias Nito, y Daniel Alberto Mejía, alias Danielito, iniciaron entonces una disputa para asumir el mando de esa agrupación criminal.

Ofrecían recompensa, sin orden de captura

Aunque finalmente Sebastián y Valenciano quedaron al frente de la Oficina de Envigado, cada uno creó sus propios grupos delincuenciales, y con ello se consolidó la división interna de la banda criminal que ocasionó gran cantidad de muertes en los barrios, comunas y corregimientos de Medellín, y otros municipios del Valle de Aburrá.

Finalmente, Maximiliano Bonilla Orozco, alias Valenciano, fue detenido el 28 noviembre del 2011 en el estado de Aragua y Maracay (Venezuela), y posteriormente extraditado a Estados Unidos.

El hermano de Sebastián, conocido como alias Frank cayó en poder de las autoridades el 17 de febrero pasado en el sur de Medellín, por los delitos de instigación para delinquir y falsedad en documento público.

A finales del 2010, el Gobierno incluyó a alias de Sebastián en el programa de recompensas, a pesar de que contra este delincuente no existía ninguna orden de captura vigente.

"Asumo el riesgo personal y jurídico al incluir a este individuo en el programa de recompensas de la Policía Nacional y ofrecer hasta 2.000 millones de pesos para la persona que entregue información que permita su captura y judicialización", señaló el entonces director de la Policía, general Óscar Naranjo, al precisar que gran parte de los homicidios en Medellín eran resultado de la guerra entre las bandas lideradas por Valenciano y Sebastián, que se disputaban el control del microtráfico en el Valle de Aburrá.

Hacia el medio día de ayer llegó a la capital del país, en un avión Caravan de la Policía Nacional, alias Sebastián, quien lucía una prominente barba y su aspecto físico era muy diferente de los registros fotográficos que se tenían de él.

La orden es la pronta extradición

Según explicó el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, Vargas Cardona alteró su apariencia con el fin de despistar a las autoridades.

Así mismo, el jefe de la cartera de Defensa dijo que la orden del presidente de la República, Juan Manuel Santos, es tramitar lo más pronto posible la extradición de Vargas Cardona con destino a Estados Unidos.