Colprensa | LA PATRIA
BOGOTÁ - Después de una amplia y diversa crítica a las zonas de concentración en que estarán las tropas desmovilizadas de las Farc, el gobierno logró este lunes que las Comisiones Primeras de Senado y la Cámara aprobaran la reforma a la ley de orden público, que será vital para la última parte de lo que se acuerde en la mesa de negociación en La Habana, Cuba.
El de hoy fue un duro debate liderado en especial por miembros de los partidos afines al presidente Juan Manuel Santos, por considerar que la norma polémica de volver a crear las zonas de concentración era volver a abrir la puerta a los llamados 'caguanes', en referencia a la amplia región que despejó el entonces presidente Andrés Pastrana.
Las principales voces de cuestionamiento a la figura jurídica de las zonas las dio Cambio Radical. El senador de ese partido Germán Varón, consideró que no es sólo una garantía para el país que actúe la ONU como verificadora de lo que puede suceder en esas zonas.
Desde el liberalismo, el senador Juan Manuel Galán sostuvo que debe haber, desde la ley y los decretos, garantías para que el gobierno no permitirá dejar a esas regiones sin la presencia del Estado, por lo que reclamó especial atención a las comunidades que finalmente deban albergar a los desmovilizados por un tiempo limitado.
Ante la creciente crítica a la figura, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, salió a reclamarle a los partidos de la coalición de gobierno que confíen en la gestión del presidente Santos y que tengan la seguridad que no va a utilizar de forma equivocada las facultades que recibirá.
“Nadie puede comparar válidamente la zona de despeje del Caguán o Santa Fe de Ralito con estas que se están solicitando. Ninguna zona de ubicación temporal será así de grande”, recalcó el ministro, quien le planteó a los congresistas que en esos procesos de paz las regiones se despejaron fue para negociar y no posteriormente a su desmovilización.
Según Cristo, “es inexplicable que se haya debilitado la confianza en el presidente Santos para conducir el proceso, hay una línea roja de las zonas de ubicación”.
El ministro le pidió a los congresistas que no le impongan esas condiciones a la mesa de negociación, que es en donde precisamente se está pactando ese tema, y de pasó negó la afirmación del senador Alexander López, del Polo Democrático, quien sostuvo que ya estaban pactadas cuales serían las zonas.
Cristo señaló que tanto el Congreso como el país pueden tener la tranquilidad que en los desmovilizados no habrá colados, que se garantizará la presencia del Estado, que tendrán una delimitación que será especificada en los decretos en los cuales se creen y que no se irán a repetir los abusos de los procesos anteriores.
En otros artículos votados está la autorización para el presidente a determinar la localización de las Fuerzas Militares, luego de crear esas zonas de concentración.
Un aspecto más es que se establecerá el rol de las autoridades nacionales e internacionales que participan en el proceso de dejación de armas y el transito a la legalidad.
Las plenarias del Senado y la Cámara serán las encargadas de votar en segundo debate el proyecto. Las mismas fueron ya citadas para el 9 de marzo. De prosperar la discusión esta ley podría estar listas unos días antes del 23 de marzo, fecha que se ha previsto para la firma final del acuerdo de paz.
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