Alerta por confinamiento de 3 mil personas en Chocó

Efe | LA PATRIA | Bogotá

La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA) en Colombia alertó del confinamiento de 2 mil 778 personas en el departamento del Chocó, fronterizo con Panamá, por combates entre dos grupos armados ilegales.

La entidad detalló en un comunicado que desde marzo pasado nueve comunidades indígenas y afrodescendientes del municipio de Bojayá están afectadas por los enfrentamientos entre la guerrilla del Eln y el Clan del Golfo, la mayor banda narcotraficante de origen paramilitar.

"A partir de una misión de verificación y seguimiento liderada por la Defensoría del Pueblo y la Diócesis de Quibdó (...) se evidencia la aguda crisis humanitaria en los territorios que habitan las comunidades afectadas", agregó la información.

Protección

La Oficina resaltó que los enfrentamientos dificultan el accionar y capacidad de respuesta humanitaria de las instituciones y de agencias de cooperación.

Ante esto, la OCHA pidió protección para las víctimas, medidas que garanticen la seguridad alimentaria y realizar brigadas de salud.

Hace poco más de un mes la oficina de la ONU denunció que desde las comunidades del Carmen del Darién, también en Chocó, tuvieron restricciones a la movilidad y acceso a servicios de salud, abastecimiento de alimentos y riesgos en protección.

Por estos hechos, el alcalde de ese municipio, Erlin Ibargüen, aseguró que cuatro menores murieron por falta de atención médica.

El pasado 12 de abril la OCHA alertó del desplazamiento de 729 personas en Tumaco (Nariño), fronterizo con Ecuador, por combates entre grupos armados desconocidos.

Un día después afirmó que 589 personas de cuatro comunidades indígenas y campesinas del municipio de Tierralta (Córdoba), se desplazaron por enfrentamientos entre la Fuerza Pública y un grupo armado ilegal.

Bojayá es recordada por la masacre perpetrada el 2 de mayo del 2002 cuando cerca de 90 civiles murieron dentro de la iglesia por la explosión de un cilindro de gas lanzado por miembros de la antigua guerrilla de las Farc en medio de combates con un grupo paramilitar.

Las otras comunidades afectadas son las de Egoróquera, Unión Baquiaza, Mesopotamia, Napipí, Bocas de Opogadó y Carrillo.