La Feria de Manizales es única y por ello es importante

Del recuerdo

Hace 100 años en Pamplona, actuó Juan Belmonte. Las crónicas de la época así lo relataron: “En esta corrida dio Belmonte la nota culminante. Fue enorme la faena realizada con el sexto de Concha y Sierra. Belmonte se lió con el toro, y desde el primer telonazo lo tuvo dominado, hipnotizado, como si la franela fuera un imán y el toro un trozo de acero. Ahí vimos pases de todos colores, naturales y redondos inenarrables, otros por alto, otros de rodillas, no ya delante de la cara del toro, sino, valga la hipérbole, debajo del hocico, y la faena, salpicada de momentos emocionantes, en los que Juanito se agarraba á los cuernos para no soltarlos hasta que la fiera iniciaba una nueva acometida siguiendo a la muleta. Hubo momentos en que el diestro se revolvía rozando al toro a lo largo del costillar, más eso no me parece más que una habilidad de puro efectismo. Lo grande, lo inmenso, la verdad, estaba en aquellos pases naturales dados con la izquierda a un palmo de las armas y seguidos de otros de pecho espeluznantes.”

Reflexión

Los aficionados a la tauromaquia no son iguales, afortunadamente, aunque tengan conocimientos y experiencias similares. Lo que los hace diferentes son sus interpretaciones del toreo y el sentimiento que la lidia y sus prolegómenos despiertan en ellos. La técnica, el valor y el arte del toreo se evalúan de forma distinta aunque objetivamente todo parezca idéntico. Por ello es inmensamente reconfortante los conversatorios sobre una determinada faena, sin pontificar y respetando a los otros en sus apreciaciones aunque cada quien mantenga sus propias convicciones. Nada más reconfortante que escuchar conceptos diferentes porque si se es consciente muchas veces le darán enfoques que han sido oscuras a su mente.

Pamplona 2014

La de Garcigrande y triunfo de El Juli:

La crónica la relató así en Mundotoro: “10 salidas en hombros en sus 15 años de matador. Y así, de 10, estuvo el torero madrileño con su lote, dos toros de estrechas opciones del amplio y generoso conjunto ganadero con el que Garcigrande se presentó en Pamplona. A los dos les buscó las vueltas el de Velilla, y a los dos les impuso su autoridad y su tauromaquia. Y si s0lo sumó dos trofeos fue porque la espada se resistió en el quinto. También el acero impidió a Talavante salir en hombros por vez primera en La Monumental. Estuvo sereno y despacioso el extremeño con dos toros distintos, pero semejantes en sus pocas virtudes, porque al más agraciado del sorteo, Finito de Córdoba, se le atragantó un puerto de montaña que hacía trece años no escalaba”.

Iván Fandiño con los de Victoriano del Río

En Aplausos se reseño así el festejo con motivo de la actuación del torero vizcaíno: “Iván Fandiño, con tres orejas, ha sido el indiscutible triunfador del festejo de este jueves en Pamplona. El de Orduña paseó dos de esos tres trofeos de "Español", un gran toro de Victoriano del Río -hierro que lidió un buen encierro en líneas generales- que fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre. Antes, con su primero, el vizcaíno ya había tocado pelo tras sufrir una espeluznante voltereta. Completaban la terna Juan José Padilla, que no tuvo opciones con su lesionado primero y logró momentos estimables al natural ante el cuarto, y Juan del Álamo, que si no llegó a pasear trofeos fue por sus fallos con la espada.”

Mañana Luís Bolívar con los Miuras

Un ejemplar de Miura para la presentación en Pamplona de Luís Bolívar que será mañana con los astados de procedencia Miura.

El rejoneador Roberto Armendáriz

El domingo pasado Roberto Armendáriz cortó tres orejas a los toros del hierro de Carmen Lorenzo, Capea. Alternó con Pablo hermoso de Mendoza quien ejecutó una valiosa faena al primer astado de la tarde, la cual no fue valorada en toda su dimensión. En el cuarto, Hermoso de Mendoza cortó una oreja. Sergio Galán, el tercer rejoneador quien también cortó una oreja esta vez al quinto toro de la ganadería de San Pelayo.

Perera: otro triunfo

El viernes en la tarde Miguel Ángel Perera ha vuelto a triunfar como lo ha hecho reiteradamente este año. De él y su faena se escribió en Aplausos: “Miguel Ángel Perera abrió la Puerta del Encierro y mostró el momento de plenitud que atraviesa. Dos orejas que debieron ser tres, el palco le negó el segundo trofeo en la rotunda faena al primero y nuevo golpe de autoridad del extremeño. Fandiño pechó con un toro muy complicado y le arrancó la oreja al sexto mientras que Sebastián Castella fue silenciado en sus dos turnos.

Perera cortó una oreja importante del que hizo segundo, un astado que llegó al último tercio con movilidad, prontitud y un punto de raza. Sin demasiada clase, sí tuvo transmisión y exigencia. Apostó Perera dejándolo crudo y le tragó, le consintió y le tapó defectos en una faena que estuvo basada en la firmeza y la seguridad. Técnicamente muy bien el extremeño, especialmente sobre la diestra por donde toreó largo y templado en varias series notables. Bajó la intensidad al natural. Mérito y esfuerzo de Perera, que sobre la diestra logró otra serie buena. Finalizó en la corta distancia y una buena estocada. El palco, a pesar de la petición, dejó incomprensiblemente el premio en un trofeo.

Muy serio por delante el quinto, astifino y con las puntas mirando al cielo. Perera no pudo brillar con el capote de salida ante un toro que salió muy suelto y buscó tablas en los primeros tercios. Poco a poco, el extremeño fue atemperando la descalzada embestida del de Vegahermosa, los otros eran de Jandilla, con las virtudes del temple y la firmeza de plantas. Bien al natural, el mejor pitón del toro, por donde llegó a torear con largura y buen trazo. El final de faena, con los circulares y muletazos sobre ambas manos sin la ayuda acaba de meter al público en harina. El pinchazo previo a la estocada dejó su premio en una oreja.”