LA PATRIA | MANIZALES
Por segunda vez en un mes el alcalde de Manizales, Carlos Mario Marín Correa, debe capotear fallos de demandas laborales que no ha podido cumplir, y los demandantes han solicitado su orden de arresto.
La última es una tutela que falló el Juzgado Primero Civil Municipal ordenando el reintegro del trabajador Marino Morales, quien solicitó amparo de derechos fundamentales a la estabilidad laboral reforzada al mínimo vital y a la seguridad social, que consideró le vulneró el Municipio.
El despacho ordenó que en 48 horas siguientes a la notificación debía ser reubicado en un cargo igual o de superiores condiciones al que ejercía cuando fue desvinculado. Como no ocurrió, Morales instauró un incidente de desacato, que como no pudo cumplir el mandatario se ordenó el arresto por tres días.
Sin embargo, el Municipio argumenta que el fallo dice que el reintegro debe darse siempre y cuando haya cargos en la planta de personal, y no hay. Hace un mes pasó lo mismo, ordenaron el arresto del alcalde, pero el fallo del desacato subió a grado de consulta con un juzgado superior y el juez echó para atrás la sanción al alcalde al considerar que no estaba incumpliendo la decisión porque no tiene cargos.
El mismo proceso se solicitó ahora, y es el juzgado de consulta el que determinará si aplica o no la sanción a Marín.
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