ALEXANDRA SERNA
LA PATRIA | MANIZALES

Sorprendido quedó ayer Belarmino Segura, docente de Ingeniería Biomédica de la Universidad Autónoma de Manizales (UAM), con la exposición que le hicieron dos estudiantes de un colegio rural de Supía sobre aeronaves robotizadas.

“La propuesta es bastante agresiva y aplicable. Estos eventos sirven, precisamente, para vincular a los universitarios de primeros semestres a la investigación y también a los de colegio”, afirmó el profesor, que participó en el sexto encuentro del nodo Caldas de la Red Regional de Semilleros de Investigación (Rredsi), en la U. de Caldas.

Allí unos 800 estudiantes expusieron unos 150 trabajos de al menos ocho universidades. Julián Andrés Nieto, del equipo organizador, indicó que las ponencias que obtengan 70 puntos, de 100 posibles, clasificarán al encuentro regional (Eje Cafetero y Norte del Valle) que será en octubre, en Pereira. “Los resultados de las evaluaciones se conocerán después, no hoy (ayer)”.

LA PATRIA cuenta en qué consisten tres proyectos de investigación, en los que se observan ingenio y preocupación por situaciones cotidianas:

Desde el aire

Un cuadricóptero, o especie de aeronave a control remoto con cuatro hélices, construyeron estudiantes de la institución educativa de la vereda Hojas Anchas (Supía). Se hizo con aluminio, tubos de PVC, madera y foamy, más el componente electrónico que incluye una cámara de video. El proyecto lo apoya el Programa Ondas.

Angie Dahiana Alarcón explicó que la intención fue diseñar prototipos de aeronaves no tripuladas, y económicos, para labores de inteligencia y rescate. Diana Alejandra Cadavid agregó que probaron el cuadricóptero llevando un neumático salvavidas, a un kilómetro de altura y con una velocidad de 60 Km/h. Ambas indicaron que esto les ha servido para comprender leyes físicas como la inercia. El equipo soporta hasta un kilo de carga.

Por una Av. Santander más amena

Angélica Patiño, estudiante de Arquitectura de la U. Católica de Manizales, es de los transeúntes que pasa de corrido por Los Rosales, pues no encuentra mobiliario público para detenerse un momento; la ahuyenta, además, la contaminación auditiva. Al menos esto fue lo que la motivó a investigar desde el Semillero Paisaje y Espacio qué elementos de la Avenida Santander generan discordia con los ciudadanos, o confort.
“En otros sectores vemos intervenciones como andenes y bolardos, pero están mal adecuados o no fueron pensados para la ciudad”. Su proyecto planteará alternativas que beneficien, por ejemplo, a personas adultas mayores.

Adictos al celular

La nomofobia es el miedo a estar sin celular. “Los teléfonos inteligentes (o smartphone) nos ofrecen herramientas para interactuar, incluso para muchos jóvenes es más fácil entablar una conversación, que el cara a cara. No obstante, se están volviendo adictos”, explicó Paola Loaiza, estudiante de Administración de Empresas de la Universidad de Manizales.
Ella y Valentina Pinilla y Valentina Alzate, dos compañeras más del Semillero de Mercadeo, realizan encuestas y grupos focales con estudiantes de esa universidad para saber por qué dependen del celular, qué opinan y las consecuencias físicas y psicológicas.